Barro bruñido

Ángel Santos es uno de los artesanos más reconocidos en esta técnica. El ganador de distintos premios a nivel estatal y nacional, se ha consolidado como un creador que pone énfasis en la innovación y originalidad. Algunas de sus piezas, entre esculturas, tibores, platos y objetos de decoración, pueden tardar hasta tres meses de trabajo.

“La iconografía que utilizo es tradicional, el legado generacional de Tonalá, pero también realizo trazos contemporáneos tratando de encontrar elementos nuevos en mi trabajo”, ha dicho el artesano.

El trabajo de Ángel Santos puede consultarse en: http://angelsantos.com.mx.

Vidrio soplado

Hipólito Gutiérrez es uno de los máximos exponentes de esta disciplina en Tlaquepaque. Con varias décadas de trayectoria, en su taller se desarrollan distintos tipos de cristalerías: entre copas, botellas, jarras, caballitos para tequila y una larga lista de objetos.

“El vidrio soplado de la tierra que nos vio nacer, su cristalinidad transmite el trabajo y dedicación milenaria de los mexicanos”, ha expresado Gutiérrez, quien ostenta dos Récord Guinness por producir las botellas de vidrio soplado más grandes del mundo. Sus piezas pueden conseguirse en: www.vidriosopladohg.com.

Cerámica de alta temperatura

La artesana Teresa Durán Sandoval formó su propio taller de cerámica en 1981, en Tonalá. Su trabajo más conocido es el de las piezas “stoneware”, revestidas con esmaltes feldespáticos, que ofrecen terminados vidriados.

Su obra incluye también artesanía mayólica y rakú, ésta última es una técnica tradicional japonesa. Sus obras pueden conocerse en la cuenta @CerámicaXochiqutezal, en Facebook.

Piedra de basalto

Molcajetes, platos, cucharas, salseros, cuchillos, esculturas, macetas y materiales de decoración, son algunas de las piezas que los hermanos Jesús, Guifredo y Adrián Rodríguez Cocula, desarrollan en su taller en San Lucas Evangelista, en Tlajomulco.

Los artesanos, que siguen la herencia de su padre Jesús Rodríguez Landino, han puesto atención en la creación de nuevos modelos, con formas más contemporáneas, con la piedra de basalto. Su trabajo puede seguirse en Facebook, bajo la cuenta Molcajetes San Lucas.

Barro canelo

Pablo es el más pequeño de la dinastía Pajarito. El artesano, que siguió los pasos de su padre Nicasio Pajarito, ha dado un giro a la tradición del barro canelo de Tonalá. Aunque la marca de la familia sigue en cada una de sus piezas, le imprime un sello actual con formas y decoraciones. Su trabajo se ha expuesto en recintos como el Museo Rufino Tamayo y en el Museo de Arte Popular de la Ciudad de México.

En su taller se puede adquirir cántaros, esculturas, nacimientos tradicionales, platones, macetas y una larga lista de objetos. Más informes en: www.facebook.com/pablo.pajarito.3. 

Información: Rebeca Pérez vega.