Rayados pagó penitencia de sus pecados con la eliminación del Guardianes 2021 y de ciertas desatenciones de sus elementos. Repasa los puntos clave del fracaso albiazul en el torneo.

Les costó cerrar

Al Monterrey pagó su penitencia con la eliminación en Liguilla con su mayor pecado. A Javier Aguirre se escaparon cinco juegos, tres empates (Necaxa, Tijuana y Santos) y dos derrotas (Chivas -tenía el empate- y Tigres).

Perdió seguridad

Aunque mostró seguridad en algunos juegos, Hugo González influyó en otros partidos con goles muy costosos para Rayados. La afición lo volvió tendencia en el Clásico Regio al no poder atajar el remate de cabeza de Carlos González que significó el 1-1. Recibió 16 goles en el torneo.

Expulsión infantil

Sebastián Vegas fue clave en fase regular, pero la expulsión ante Tigres le costó 3 juegos. Rayados ni con Nicolás Sánchez o Adrián Mora llenó su lugar. La afición le celebró el choque contra André-pierre Gignac, pero luego lo extrañó en Liguilla.

Ni como revulsivos

Avilés Hurtado (9 relevos) y Dorlan Pabon (5) no funcionaron como revulsivos. Los colombianos incluso fueron los sacrificados de Javier Aguirre, pues no mostraron oficio ofensivo al no marcar un solo gol en el torneo.

Gallardo y sus desatenciones

Jesús Gallardo lució más concentrado en sus redes sociales que en la cancha. Lo expulsaron ante Pachuca y el equipo sufrió una derrota. Perdió 241 balones, un promedio de 15 por partido.

Cambio maldito

Cuando Javier Aguirre sacaba a Celso Ortiz para darle juego a Matías Kranevitter, Rayados se caía. El “Vasco” tuvo que recurrir a Ortiz en 15 juegos para darle solidez y salida al mediocampo albiazul.

Se acabó el encanto

Rogelio Funes Mori estaba firmando una temporada de encanto, al anotar 9 goles en el Guardianes 2021, pero terminó con una sequía de 618 minutos sin marcar en Liga y “Conca”. Su sequía le pegó al equipo en el cierre del torneo.