Tras librar la batalla contra el Covid-19 y un doble transplante de pulmón que lo mantuvo internado por ocho meses, Toño Mauri dejó el hospital en febrero pasado y, a su salida, un mundo de sorpresas y nuevas perspectivas lo recibieron.
Aún en recuperación, pero con toda la disposición de retomar su rutina, el actor compartió que ve la vida de una manera muy distinta, pues, si bien, antes de este suceso se movía por la fe, ahora está seguro de que esta segunda oportunidad es un regalo y bendición de Dios.
“Hoy más que nunca aprecio la salud, estar bien, tener fuerzas para lo que me propongo y, sobre todo, tengo interés en compartir mi experiencia con otras personas a través de mi testimonio para ayudar a alguien que pase por lo mismo que yo. Estoy muy contento de transmitir este mensaje y para eso cuento con el apoyo de los míos”.
Toño Mauri
Su esposa, Carla Alemán; su hija, Carla Mauri, y el resto de su familia han sido clave en su proceso de recuperación, al igual que su hijo, Antonio, quien está más unido a él que nunca.
El joven ha estado atento a cada necesidad de su padre para sacarlo adelante, incluso, se ha convertido en una fuerte inspiración para que Toño continúe con sus indicaciones médicas.
“Hay veces que no tengo ganas de nada, pero Toño me anima a salir a caminar, se lo agradezco porque a veces tú mismo te dejas caer y él ha sido mi motivación. Mi rehabilitación consiste en tomar medicamentos, hacer inhalaciones diarias y él está muy al pendiente de todo, me asiste, baña y todas las cosas que aún no soy capaz de hacer solo”.
De esta forma, ambos se concentran en retomar el tiempo y fortalecer su unión, la cual no sólo se basa en la relación parental, también en la laboral, pues juntos realizan la serie “Mariachis”, primer proyecto de su casa productora, que iniciaron antes de que Toño ingresara al nosocomio.
“Mi sorpresa fue que al despertar del coma, me enteré que él siguió con todo como lo habíamos planeado, lo cual me motivó. Es una emoción enorme compartir esto con él, primero, porque es mi hijo y el amor es incondicional; verlo involucrado, me encanta y me hizo admirarlo aún más”, explicó.
UN AMOR RECÍPROCO
Para Antonio, la enfermedad de su padre significó un golpe duro, pues, el tiempo que estuvo hospitalizado, la familia tuvo muchos momentos de preocupación, sin embargo, se concentraron en hacer todo aquello que al jefe de familia le hubiera gustado.
“Llegó un punto en el que no queríamos comer, no teníamos hambre, no dormíamos bien, la pasábamos mal; de pronto, nos llegó una paz para sacarnos de esa cueva, la cual nos guió. Siempre decíamos que lo último que podíamos perder era la esperanza, así que realizamos ciertas cosas para cuando saliera”.
Antonio Mauri
Para ambos, su prioridad es la fe, por lo que en cada viaje acostumbran visitar iglesias
y agradecer los momentos vividos, como ocurrió en su paseo por Sacramenia, España,
en febrero de 2020.
“Además de que en esos momentos tenía mil pensamientos, encontré inspiración para sacar muchos proyectos, mi hermana me ayudó a componer, entre los dos escribimos canciones. También, tenía en mente que venía lo de la serie, dirigí mi esfuerzo en eso”, dijo Mauri Alemán.
Sobre el trabajo de preproducción de este proyecto, explicó que debía tomar muchas decisiones, así que puso manos a la obra para cuando su papá regresara y pudieran retomar el trabajo juntos.
“Afortunadamente, pensamos igual y siempre me ha apoyado, entonces sentía tranquilidad de ciertas determinaciones, pero claro que habían muchas veces que me detenía a pensar: ‘¿qué querrá él?, ¿y si esto no es tan bueno como yo creo?’, tenía mucha presión, sin embargo, un equipazo que me respaldó”, agregó el joven de 22 años.
fue de los últimos viajes que hicieron juntos antes de la pandemia.
Con todo listo, padre e hijo planean empezar el rodaje en octubre, lo cual los llena de emoción, pues ambos actuarán en este programa, el cual contiene los valores y mensajes que ambos quieren transmitir a los televidentes.
en la que trabajan juntos. El rodaje lo retomarán en octubre próximo.
Ambos concuerdan en que a partir de este renacer, se dedicarán por completo a hacer solamente contenido con sentido y principios, además de que no perderán el tiempo en contratos que no les apasionen.
“Recibirlo en el hogar fue un regalazo, hay días que lo volteamos a ver y no nos la creemos. Nos dimos cuenta que cada instante vale la pena, como familia, ya no dejamos nada para mañana, vamos en una nueva dirección y estamos aferrados con el propósito de la vida de ayudar, inspirar y unir; es una energía que entró con la recuperación de mi papá”, dijo.
“Fue impactante ver cuánta gente rezaba por él
Antonio Mauri
y estaba seguro que eso se escucharía e iba a funcionar. Es curioso que, aunque él estaba en coma, sentíamos su espíritu en casa y eso nos impulsaba”.
FORTALEZA FAMILIAR
Al inicio de la pandemia, los Mauri Alemán se mudaron a su casa
de Miami para pasar juntos el periodo de aislamiento, donde aprovecharon el tiempo para convivir, ejercitarse y conectar espiritualmente.
del personal médico que lo trató.
“El 26 de junio cumplo un año de haber entrado al hospital y han sido una serie de experiencias que ahora estoy asimilando y son parte del cambio y adaptación. El transplante de pulmones requiere un compromiso, cuidado, una conciencia especial, saber que hoy, si estoy vivo, es gracias a una persona que pensó en donar sus órganos y salvar la vida de más gente”.
Toño Mauri