Para Yael, Michelle y Debbie Sandler, cada momento que pasan juntas es una celebración y es que más allá del lazo consanguíneo que las une, las tres hermanas comparten su gran pasión por el mundo fashionista. 

“Mi gusto por la moda nació desde chiquita, a mi mamá (Frida) le encantaba llevarnos a tienditas y tenernos bien vestidas, además de que nos enseñaba cómo combinar los colores; en general, siempre fue muy artística, estuvo involucrada en el diseño, y mi abuela también fue así, entonces, ha sido algo que se ha pasado de generación en generación”, platicó la mayor de las Sandler, Yael. 

En el caso de Michelle, la influencia de su madre fue más allá de sólo aprender a crear el mix & match perfecto en cada atuendo, pues hace un par de años lanzó su propia línea de ropa, Huatika. 

De niña, cortaba y transformaba mis tshirts; en casa, nos inculcaron el arte y diseño, por lo que se dio de forma natural el que quisiera sacar mi marca, en la que busco que las prendas sean cómodas, versátiles, favorecedoras y que las puedas usar de distintas maneras”, dijo. 

Debbie es la menor y, aunque enaltece el estilo de cada una de sus hermanas, ha creado el suyo, el cual define como totalmente femenino. 

“Siempre uso algo que me defina como persona y, en mi vida diaria, trato que mis outfits vayan con la ocasión o evento”, comentó la recién casada con el médico regiomontano Daniel Artenstein. 

A pesar de que las hermanas ya no comparten el mismo techo porque se casaron, son muy unidas y se apoyan en todo lo que pueden. 

“Nos encanta mandarnos fotos de lo que vamos a ponernos diario para que escojamos cuál es el outfit que más les agrada y siempre estamos en sincronización” platicó la psicóloga Debbie. 

Y, cada que pueden, recuerdan esos momentos en casa en los que compartían más que buenos momentos y anécdotas. 

“Cuando vivíamos juntas, en especial Michelle y yo, como sólo nos llevamos tres años, nos prestábamos todo; con Debbie ya había más diferencia de edad, pero en cuanto pudo, también se metía a nuestro clóset”, contó Yael.

“Como soy la más chica, hasta hace poco empecé a robarles ropa; para bodas siempre estoy en sus clósets viendo qué ponerme”. 

DEBBIE SANDLER

“El gusto por la moda lo comparto con mis hermanas; por ejemplo, con Michelle que tiene su línea de ropa, nosotras le ayudamos al decirle lo que nos gusta de cada colección y siempre nos pone a modelar sus prendas”. 

YAEL SANDLER

“Era un clóset compartido cuando vivíamos juntas, siempre nos poníamos la ropa de la otra y fue un tema, porque todas somos la misma talla con mi mamá, de prendas y zapatos”. 

MICHELLE SANDLER

INSEPARABLES 

Desde hace varios años, las hermanas ya no viven juntas, pues todas ya se casaron, pero cada que tienen la oportunidad se juntan para vivir grandes momentos.

A finales de mayo pasado, Debbie se casó en Monterrey con Daniel Artenstein, y Michelle y Yael fueron dos de sus cómplices para que fuera uno de los días más felices de su vida. 

Días antes de que la menor de las Sandler diera el ‘sí, acepto’, toda la familia se juntó para la serie de festejos previos a un enlace judío.

En julio de 2020, se reunieron para darle la bienvenida a Víctor, el primogénito de Michelle y Elías Mizrahi.

Además de ser muy cercanas entre ellas tres, también lo son con su mamá, Frida, con quien, en 2017, compartieron un viaje entre chicas por Asia.

Desde antes de la boda de Michelle, la cual celebraron en agosto de 2016, madre e hijas se escaparon a Nueva York para checar algunos atuendos.