Llega para quedarse
El Operativo Conduce sin Alcohol arrancó un viernes de 2003. En un evento previo a su banderazo, el entonces Secretario de Seguridad Pública del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, alertó a los agentes que participarían de tener cuidado con los jóvenes que recorrían la Capital acompañados de escoltas.
“Tengan mucho cuidado porque no va a faltar el niño ‘pirrurris’ que traiga guaruras y en esas circunstancias también los guaruras deben ser detenidos”, dijo.
El procedimiento establecía que si una persona daba positivo, el vehículo sería remolcado hasta las instalaciones del Juzgado Cívico y se le entregaría al conductor una vez cumplida la sanción.
A 18 años de aquel evento, se han retirado 151 mil 467 vehículos, de acuerdo con cifras de la Secretaría de Seguridad Ciudadana.
Caen al Torito
Políticos como Manuel Espino, Jorge Emilio Gónzalez y Javier Corral han llegado al Torito. De las 2 millones 102 mil 711 pruebas, 228 mil 614 conductores han superado los 0.40 grados de alcohol. De acuerdo con los datos de las autoridades, 213 mil 242 automovilistas eran hombres y sólo 15 mil 372 eran mujeres.
Destituyen a su director
En diciembre de 2019, Grupo REFORMA dio a conocer que tres conductores entregaron mil pesos a uniformados que estaban a cargo de las pruebas de alcoholemia para sortear el arresto administrativo.
El caso provocó que el responsable del programa, Eduardo Francisco Veraza Cruz, presentara su renuncia y que la dirección general de Asuntos Internos de la SSC iniciara investigaciones contra elementos adscritos a los operativos.
Se transforma con la pandemia
Debido a la pandemia, el Gobierno capitalino debió modificar el protocolo de aplicación de las pruebas.
Además de que los agentes ahora deben mantener sana distancia y usar cubrebocas, se incorporó el Alcostop, que se trata de un medidor que detecta la presencia de niveles de alcohol en el ambiente de la cabina del auto.
En caso de que éste detecte que los niveles superan lo permitido, el automovilista es sometido a una entrevista.
Endurecen medidas
En febrero pasado, las medidas del Programa fueron endurecidas.
Los vehículos ya no pueden ser entregados a los acompañantes de los conductores. Si estos mismos se amparan para no cumplir con su arresto, el vehículo queda bajo resguardo hasta cumplir con las horas pendientes. De no hacerlo el auto puede ser chatarrizado.
