Aunque las tradiciones son muy importantes para Zaira Zepeda, quien ve en momentos como la colocación del altar de muertos una oportunidad para recordar a seres queridos, la empresaria siempre busca que sus montajes vayan un paso más allá.
“Hay sentimientos que marcan las macrotendencias y hoy uno de los que está rigiendo es el nutrir y liberar el espíritu”, explicó la fundadora de Local Trendy, “cuando hablas de esto piensas en colores que te lleven a la calma”.
“Venimos de un periodo complicado y lo que menos queremos es lo que nos pueda generar tensión o saturación, por ello, optamos con una paleta en neutros, con tonos en rosados y no pueden faltar los elementos mexicanos”.
La ofrenda, diseñada por Zaira en colaboración con los floristas Paula Mendoza y Rolando Torres, busca reinventar este tradicional adorno de Día de Muertos y dotarlo de elegancia y glamour a través del uso de materiales como el mármol, terciopelo y cristal.
La comida, la cual no podía faltar, también tuvo un toque único, pues creó destellos de color en la mesa y amplió la gama con el rosa y verde de la pitaya.
“Nosotros elegimos estos frutos porque son originarios de México, en su mayoría”, mencionó Rolando Torres, cofundador de Carlota Flower Lab.
“También, incluimos las calabazas que es un ingrediente que se ha ido incorporando, pero quisimos que fuera también folclórico y que tuviera varios elementos que utilizamos en nuestro día a día y que son diferentes a los que otros países conocen”.
Una de las piezas centrales fueron las composiciones de flores, como violetas, claveles, santuarios, follajes preservados y hortensias.
“Viene mucho el estilo orgánico, que no es el típico arreglo redondito, que ya está muy visto; ahora, éste es despeinado, asimétrico, con contraste, sombras”, comentó la florista Paula Mendoza.
“Esta ofrenda no es la típica que normalmente estamos acostumbrados a ver con colores como el naranja y colorida. Todo está representado aquí, pero de diferente manera”.
Zaira Zepeda, fundadora de Local Trendy
Elegancia y glamour
- Para el montaje, usaron una paleta de colores neutros entre los que se encontraban distintos tonos de rosas, así como el naranja y el terracota.
- La comida, como el pan de muerto, no podía faltar; además, a través de frutas, como las uvas y la calabaza, crearon destellos de color