“Algunos dicen que el mundo terminará incendiado”, escribió el poeta Robert Frost, por mucho del 2021, los fotógrafos de la AP capturaron escenas de un mundo en llamas, entre escombros de ruinas.
En Nueva Delhi, un hombre corre entre las piras de víctimas de Covid-19, muchas fogatas, mucho calor, demasiadas víctimas. En una playa de Limni, Grecia, el horizonte es iluminado por las llamas de incendios forestales arrasando el este del Mediterráneo.
Y en la isla española de La Palma, en las Islas Canarias, el infierno está en el volcán Cumbre Vieja. Pero más de 10 mil millones de metros cúbicos de cenizas transformaron al mundo en un negativo, con la ceniza negra tomando el lugar de la blanca nieve.
No toda la combustión es tan literal.