El sector de la moda se vio afectado por la pandemia y, ante ello, Stephanie López, fundadora de la plataforma para emprendedores Ideas a Negocios, pensó que era buen momento para apoyar a los talentos mexicanos y que vieran lo que sucede en la industria en otros lugares.
La emprendedora creó un fashion bootcamp, el cual se llevó a cabo durante siete días en la Gran Manzana, al que viajaron 11 chicas para aprender de diseñadores, stylists y personas clave y así crecer sus marcas.
“Las acercamos a expertos como Ricardo Seco, quien fue un pilar muy fuerte en este proyecto; tuvimos un taller intensivo y les platicó sobre su carrera, los retos y cómo superarlos”, compartió Stephanie.
“También, les dijo que él podía apoyarlas y conectarlas con proveedores; adicionalmente, tuvimos cursos con Diva Lomas y Neto Soberanes, así como con grandes personalidades en ventas, e-commerce, negociación, fue algo muy integral”.
"Creamos un equipo padrísimo, en el que estoy segura se vienen grandes proyectos de ahora en adelante; todos tenemos la meta de apoyar talentos, compartir más y generar una estructura de experiencias de aprendizaje para la gente”.
Para seleccionar a las aspirantes, proceso que duró cinco semanas, primero realizó una llamada telefónica de scouting; también, se fijó en su liderazgo, en lo que hacen, que tuvieran una actitud para sumar y crear sinergia y, finalmente, la propuesta de moda que tenían.
“Un tema que se reforzó muchísimo fue que las primeras veces que dicen que no y que parecen ser una barrera se convierten en un sí, es la puerta para algo más; en diversas ocasiones, todos los ponentes coincidimos en que el camino del emprendimiento de moda no es fácil”, agregó.
“Se creó una visión en grande. Siendo creativos, tienen que buscar ser el mejor y salir de la zona de confort porque hay un mundo más allá de lo que hacen para marcar tendencias; en lo personal, aprendí mucho de la humildad de la gente con la que trabajamos”.
Daniela Macías estuvo en esta experiencia y compartió que tuvo muchos aprendizajes como ver qué estaba haciendo bien y mal dentro de su marca y se dio cuenta que existe un mundo lleno de posibilidades en el sector.
“Me llevo conmigo el cariño de toda la gente que conocí y compartí conocimiento, es la oportunidad perfecta para hacer y explotar tu negocio y creatividad”, reveló la fundadora de Danielle Couture.
A su vez, Yazmín Urrutia declaró que lo que vivió fue inolvidable, pues se inspiró y fortaleció con todo lo que experimentó, asegurando que existe un antes y un después de esta entretenida actividad.
Gracias a los buenos comentarios, Stephanie ya piensa en la segunda edición, la cual se realizará en febrero del 2022 dentro de la edición correspondiente al Fashion Week, así como un destination bootcamp de negocios de todo tipo en Tulum para diciembre.
"Lo que más me agradó fue el networking tanto con mis compañeras como con la gente que conocimos en el viaje, eso me cambió el chip en muchas cosas”.
