Tras un emocionante cierre en el que Max Verstappen rebasó a Lewis Hamilton en la última vuelta, el neerlandés conquistó el Gran Premio de Abu Dhabi para proclamarse, por primera vez, campeón de la Fórmula Uno.

La F1 tiene nuevo rey

La Fórmula Uno le dijo adiós a toda una era bajo la bandera británica y vio este domingo la consagración de un nuevo monarca neerlandés: Max Verstappen.

Lewis Hamilton se encaminaba a su octavo título de la categoría, pero una bandera amarilla a cinco vueltas del final cambiaría la historia.

Tras el retiro del Safety Car en la última vuelta, Verstappen, quien marchaba segundo, aceleró y consiguió un épico rebase a Hamilton, ventaja que logró mantener hasta cruzar la línea de meta en primero.

Así, mientras en el garage de Red Bull la euforia se combinaba con la incredulidad, el joven de 24 años conducía su auto ya con la gloria de su primera conquista en sus hombros.

Una nueva era en el “Gran Circo” ha comenzado.

Un abandono que duele

Se perfilaba rumbo a despedir su temporada con su sexto podio, pero Sergio Pérez tuvo que decir adiós a sólo dos vueltas del final del Gran Premio de Abu Dhabi.

En la vuelta 56, cuando se ubicaba en tercer lugar y la prueba todavía estaba bajo bandera amarilla, el mexicano tuvo un problema en su auto que lo obligó a retirarse.

Tras este resultado, el tapatío se quedó en el cuarto lugar general con 190 puntos.

Amarga despedida

El campeón mundial del 2007, Kimi Raikkonen, no pudo tener una discreta despedida de su carrera en la Fórmula Uno, pues tuvo que abandonar el Gran Premio de Abu Dhabi por un problema en su coche.

A su Alfa Romeo le fallaron los frenos y se salió de pista, lo que ocasionó que tocara ligeramente el muro exterior en la vuelta 27. Así terminó su última aventura en el “Gran Circo”, en el cual fue campeón en el 2007 cuando corría para Ferrari. 

Pese a su dsafortunado desenlace, el público lo reconoció al darle el premio a “Piloto del Día”.

El 'protagonista' inesperado

Sin tener presión de ningún rival, el canadiense de Williams, Nicholas Latifi, se estrelló con el muro exterior en la salida de una curva a cinco vueltas del final, lo que originó que apareciera la bandera amarilla y el ingreso del Safety Car.

Después, para el rearranque, Lewis Hamilton estaba en primero y, adelante de Max Verstappen, había cuatro autos lapeados, por lo que el título del británico lucía inminente. Sin embargo, antes de reiniciar en la última vuelta, se dio la indicación de que los rezagados cedieran su puesto al neerlandés.

Max aprovechó su cercanía con Lewis, aceleró, lo pasó y se quedó con la historia.

Premio... ¿sin sabor?

Luego de ver cómo se les escapó de las manos el Campeonato de Pilotos, en Mercedes se tuvieron que conformar con el título de Constructores.

Éste fue el octavo año en fila en que los de Brackley se agencian esta distinción.

Un festejo de locura