Bajo la iluminación de candelabros y candiles combinados con porcelana, amantes del diseño de interiores y la técnica de cerámica compartieron una velada en la que apreciaron la presentación de una colección de accesorios.
“Es una mezcla muy natural aunque no parezca. La luz, cuando pasa por la porcelana, realmente da una calidez a los espacios muy especial y que la distingue de cualquier otro material”, platicó Cristina Egido, directora de marketing de Lladró.
Los invitados pudieron apreciar los detalles incluídos en cada una de las piezas de la colección “Colección Firefly”.
“A mí me encanta la porcelana porque es un material maravilloso, cuando conoces el trabajo detrás, la complicación de llevarla a cabo, tiene mucha cuestión artística y dificultades técnicas”, contó Claudia Azpiri, quien se dedica a relaciones públicas.
La colaboración de esfuerzos se dió entre la diseñadora de interiores mexicana Olga Hanono y la marca valenciana Lladró, dando como resultado una obra que fusiona culturas.
“Lo que hace Olga de mezclar porcelana e iluminación con Lladró me parece un éxito de cooperación, tanto de países como de talentos. Me encanta la creatividad y cómo se puede mezclar el arte con la funcionalidad”, comentó Arie Schwartzman, esposo de la diseñadora.
La velada tuvo como sede Casa Gilardi, en la colonia San Miguel Chapultepec, y fue organizada por Casa Palacio.
“Para esta colección, quería hacer algo moderno, contundente, atemporal, por eso mezcle metales y texturas, lo opaco con lo brillante y está llena de contrastes”, expresó Olga sobre su labor.
