El nuevo informe de Oxfam “Las desigualdades matan” presenta un panorama desolador sobre la acaparación de recursos y la pobreza.
El estudio presentado el lunes en la Agenda de Davos del Foro Económico Mundial afirma que las desigualdades contribuyen a la muerte de al menos 21 mil 300 personas al día, el equivalente a una persona cada cuatro segundos.
Además, el Covid ha incrementado este panorama: la fortuna de los diez hombres más ricos del mundo se duplicó desde el comienzo de la pandemia, mientras que los ingresos del 99 por ciento de la humanidad se han reducido, según un informe de Oxfam el lunes.
Estos son otros hallazgos:
Nunca ha resultado tan importante poner fin a las violentas y obscenas desigualdades, recuperando el poder y la riqueza extrema de las élites, incluido a través de medidas fiscales, para reintegrar ese dinero en la economía real y salvar vidas".
Gabriela Bucher, directora ejecutiva de Oxfam Internacional.
LOS MULTIMILLONARIOS
DESIGUALDAD DE GÉNERO
La pandemia ha retrasado el camino hacia la paridad: ahora se tardarán 135 años en cerrar la brecha de género, y no 99 años como se estimaba antes de su irrupción.
En 2020, las mujeres perdieron 800 mil millones de dólares en ingresos, y actualmente hay 13 millones menos de mujeres con trabajo que en 2019. Además, 252 hombres poseen más riqueza que los mil millones de mujeres y niñas que viven en África, América Latina y el Caribe.
IMPACTO RACIAL
Según Oxfam, la pandemia ha afectado especialmente a grupos racializados.
En Inglaterra, las personas de origen bangladeshí tenían cinco veces más probabilidades de morir de Covid-19 que la población británica blanca durante la segunda ola de la pandemia.
En Brasil, las personas negras tienen 1.5 veces más probabilidades de morir por Covid-19 que la población blanca.
En Estados Unidos, 3.4 millones de personas negras estarían vivas actualmente si tuvieran la misma esperanza de vida que la población blanca, algo directamente vinculado con el esclavismo y el racismo sistémico.
NUEVAS DISPARIDADES
Oxfam estimó que por primera vez en una generación, las desigualdades entre países crecerán.
Los países pobres y en desarrollo, que no tuvieron acceso a las vacunas contra Covid-19 debido al acaparamiento por parte de naciones ricas, tuvieron que recortar su gasto social mientras aumentaban sus niveles de endeudamiento por la crisis económica y ahora deben adoptar medidas de autoridad.
La cantidad de personas con Covid-19 que mueren por el virus en países en desarrollo es casi el doble que en los países ricos.
La pandemia de Covid-19 ha sacado a la luz la codicia y las oportunidades económicas y políticas que han convertido estas desigualdades extremas en un instrumento de violencia económica. Tras años de investigación y de campañas, Oxfam ha llegado a esta conclusión, estremecedora e incontestable".
Gabriela Bucher, directora ejecutiva de Oxfam Internacional.