Cuenta que Eduardo le mintió sobre un supuesto contagio de Covid-19 y le pidió dinero para solventar gastos de hospitalización. Después se dio cuenta que todo era un engaño y no era la primera víctima de este tipo de estafas. Para el momento que descubrió el modus operandi, el abogado ya le había robado alrededor de 26,000 pesos.
Cuando la joven buscó a este sujeto para cobrarle le dio largas e incluso le soltó varias excusas como que lo habían asaltado, sus cuentas estaban congeladas o que de plano no caían los depósitos. Por supuesto que ella dejo de creer todo lo que Eduardo decía, es por eso que contactó con un amigo del presunto estafador y fue ahí donde se dio cuenta que sus mentiras llegaron a otro nivel.