En medio de un espíritu de renovación de la Ciudad, en los primeros años de la década de 1950, el arquitecto Ignacio Díaz Morales construye la Cruz de Plazas (Plaza de Armas, Guadalajara y Liberación y Rotonda de los Jaliscienses Ilustres). En ese contexto diseña también dos fuentes conocidas como Dos de Copas, idénticas entre sí, que le dan vida y movimiento a la explanada de concreto.
Pocos saben, pero la vistosa fuente ubicada en la glorieta de Arcos y Niños Héroes es de la autoría del reconocido arquitecto Luis Barragán. Este inmueble, que data de 1955, fue diseñado por el ganador del Premio Pritzker (considerado el Nobel de la arquitectura) como parte del trazo de Jardines del Bosque, incluso el propio Barragán hablaba que se establecía un diálogo entre la fuente y la escultura del “Pájaro Amarillo”, de la autoría de su amigo Mathias Goertiz, a unos metros de distancia.
Inaugurada en 1956, la fuente y glorieta más conocida de Guadalajara es sin duda la que se dedica a la diosa Minerva. La escultura de la deidad romana, diseñada por el escultor Joaquín Arias, mide ocho metros de altura y está asentada en una fuente de amplias proporciones (Avenida Vallarta y López Mateos), con un diámetro de 74 metros, que fue encargada al reconocido arquitecto Julio de la Peña, también autor de piezas como la Biblioteca Pública del Estado en el Agua Azul.
Como una manera de conmemorar el momento histórico, en Guadalajara se construyó una fuente alusiva a los Juegos Olímpicos de 1968. Sobre la Calzada Independencia, en el cruce con Monte Cáucaso, esta escultura abstracta fue realizada por Enrique Rico y Emilio Pulido, y una de sus alegorías era reflejar un mensaje de paz y armonía entre los pueblos.
La fuente de La Hermana Agua (Avenida Las Rosas y López Mateos) se ha convertido en todo un punto de referencia para la zona de Chapalita. Esta estructura de juegos entre figuras geométricas que sirven de escenario para el baile del agua, fue diseñada por el escultor y arquitecto Fernando González Gortázar, en 1970.
Una de las indispensables es la fuente de Los Niños Traviesos, mejor conocida en el imaginario popular como la “Fuente de los Niños Meones”. Este lúdico monumen to se ubica en en la Plaza Tapatía y está integrado por cuatro pequeños en posiciones lúdicas, de la autoría del reconocido escultor Miguel Miramontes, en 1982.