¿Clonaron tu tarjeta de crédito?
La clonación de tarjetas es un delito que consiste en robar la información contenida en el plástico mediante dispositivos electrónicos llamados skimmers, los cuales son usados para transferir posteriormente la información a una tarjeta vacía y así realizar operaciones fraudulentas.
¿Banda magnética o chip?
A diferencia de las tarjetas magnéticas, el chip tiene una gran ventaja: no puede clonarse.
Como es un microcircuito, se puede almacenar información del cliente y vincularla al plástico con un número confidencial.
Este número será necesario para hacer pagos por este medio.
De esta forma se sustituye la firma convencional y se reduce la incidencia de fraudes.
Pregunta en tu sucursal sobre el proceso para reemplazarlos.
¿Y si ya clonaron tu tarjeta?
De acuerdo con la Condusef, debes saber que, en cuanto a tarjetas de crédito, la ley te protege:
Si no reconoces un cargo, puedes reclamar.
Si clonaron tu plástico y hay operaciones que no reconoces, tienes hasta 90 días naturales -a partir de la fecha en que se realizó el cargo- para hacer tu reclamación.
El Banco de México obliga a las instituciones financieras a liberarte del pago y a devolverte el monto de la transacción dentro de los cuatro días hábiles posteriores a tu reclamo.
Lo anterior no aplica si:
a) el banco comprueba que la compra se autorizó en algún comercio mediante el chip de tu tarjeta.
b) se comprueba que se autorizó la compra por internet con los sistemas de autentificación en línea que garantizan que el tarjetahabiente fue quien autorizó la operación, como Veried by Visa o MasterCard SecureCode.
¿Y si hay operaciones autorizadas sin firma?
Hay comercios que tienen autorizado por los bancos realizar operaciones con tarjetas de crédito sin requerir firma del cliente.
En estos casos, el banco será responsable de las transacciones que no reconozcas en un plazo de 90 días naturales -a partir de que se efectuó el cargo-.
La institución financiera deberá abonarte los recursos respectivos a más tardar el segundo día hábil siguiente a tu reclamación, sin requisito o trámite adicional alguno.
Si el banco demuestra que tú realizaste las operaciones, deberás asumir los cargos hechos a tu tarjeta.
¿Cómo reclamar?
Acude a cualquier sucursal de tu banco y pregunta por la Unidad Especializada de Atención a Clientes (UNE), donde presentarás la solicitud de aclaración (el formato te lo proporciona el banco y una vez que lo entregues debe darte un acuse de recibo o folio).
Explica lo sucedido con una redacción clara, entendible y sustentada.
El banco deberá darte respuesta dentro de un plazo que no exceda los 30 días hábiles, contados a partir de la fecha de recepción de la solicitud, en estos dos sentidos:
- Tu reclamación no procede si el banco determina que tú o un tarjetahabiente adicional autorizaron el cargo, te revertirá el abono (recuerda que te devolverá el monto de la transacción dentro de los cuatro días hábiles posteriores a tu reclamo), es decir, te realizará un nuevo cargo a tu cuenta por este concepto. Sin embargo debe poner a tu disposición un dictamen con los documentos y evidencias, así como un informe detallado en el que se dé respuesta a los hechos que presentaste en tu aclaración.
- Tu reclamación procede si pasados los 45 días la institución no te entrega un dictamen, el abono que te haya efectuado ya no podrá revertirse.
En caso de no recibir ninguna respuesta por parte de la institución financiera, o que ésta sea en sentido negativo, en la Condusef te ofrecen orientación jurídica especializada y te ayudan para que tú y el banco lleguen a un acuerdo.
Puedes contactarlos a través de los teléfonos 555-340-0999 y 800-999-8080.
Asegúrate contra fraudes
Pregunta a tu banco sobre seguros contra fraude, robo y asalto en cajeros automáticos.
Algunos tienen costo, otros te los otorgan gratuitamente con cierta antigüedad con tu cuenta, y otros te los ofrecen como un beneficio adicional.
Toma en cuenta que para que el seguro de protección funcione debes estar al corriente con tus pagos, y en algunos casos tendrás que levantar una denuncia ante el Ministerio Público.
Siempre toma precacuciones
No pierdas de vista tu tarjeta al realizar pagos con ésta; en los restaurantes pide que te lleven la terminal a tu mesa o paga directamente en caja.
Lleva un registro de tus transacciones y revisa tus estados de cuenta para detectar posibles anomalías con tus cuentas.
Si dispones de efectivo con tu plástico, cerciórate de que no tenga ningún dispositivo adicional instalado en el lector de tarjetas.