La primera vez que se realizó fue en 2020 y es un evento que surgió tras las manifestaciones por los feminicidios de Ingrid Escamilla y la menor de 7 años, Fátima Ceciliano.

¡El nueve ninguna se mueve!: así surgió la iniciativa

A través de redes sociales, diversas colectivas feministas comenzaron a convocar al paro nacional, con una acción de concientización por los feminicidios en el País.

La intención era demostrar cómo sería la vida si las mujeres desaparecieran

#UnDíaSinNosotras

En ese momento, la pandemia no había iniciado aún y el paro se reflejó en universidades, empresas, gobierno y demás instituciones a las que las mujeres decidieron ausentarse.

Algunos de los Estados participaron:

Las calles de la Ciudad lucieron vacías, en el metro pocas mujeres hacían uso del transporte, oficinas y aulas quedaron desiertas y, muchas veces, reemplazando su ausencia con un pañuelo morado.

Incluso San Lázaro lució vacío tras la ausencia de las mujeres.

Alrededor del 40 por ciento de las mujeres que trabajan en el Gobierno de la Ciudad se sumaron al paro

La ausencia fue un día después de la marcha por el #8M

Este año las calles lucen igual de desiertas, con mujeres ausentes en recintos, oficinas, escuelas y hasta en en Senado.

La Cámara Alta tuvo que suspender sesión por la ausencia de legisladoras que al ánimo de El nueve ninguna se mueve, decidieron ausentarse de sus puestos

Y en 2022...

Jezabel no acudió este miércoles a clases por sororidad, y como protesta ante la muerte y la desaparición de mujeres. Ella es estudiante de la FES Acatlán, en Naucalpan, en donde este día acudiría a tomar clases de Derecho. 

Sin embargo, en el 9M de este año no todas pudieron ausentarse de sus tareas diarias, fue el caso de Bertha Alicia, quien debió acudir al hospital para acompañar a su hijo, Joshua Rafael, para que recibiera el tratamiento de quimioterapia que necesita.

María Elena, de 52 años, es organillera en la Alameda Central, en el 8M decidió no trabajar, sin embargo, este miércoles se reincorporó a sus tareas habituales, para recuperar el dinero que no obtuvo ayer.