EL ARTE DE AMAR

"De Vero, admiro el gran corazón que tiene, su creatividad, su manera de materializar sus ideas, lo divertida que es... te podría decir demasiadas cosas”
DANIEL DOMIT, novio
VALLE DE BRAVO.-Desde el día uno que arrancó la planeación de su enlace religioso, Vero Villarreal y Daniel Domit se involucraron en el proceso; juntos revisaron desde la música y todos los detalles.
“Estuvo súper bonito porque todo lo organizamos él y yo, estuvo muy padre y obviamente, ya ver la fiesta realizada, llevando la forma y a toda nuestra familia junta, fue una boda que aunque fue de 300 y cacho personas, muy íntima, estaba la gente que queríamos, nuestra familia, nuestros más amigos, la verdad estuvo increíble, la gozamos desde el minuto uno”, contó Vero, quien portó un vestido de Jesús Peiró.

VALLE DE BRAVO.-Desde el día uno que arrancó la planeación de su enlace religioso, Vero Villarreal y Daniel Domit se involucraron en el proceso; juntos revisaron desde la música y todos los detalles.
“Estuvo súper bonito porque todo lo organizamos él y yo, estuvo muy padre y obviamente, ya ver la fiesta realizada, llevando la forma y a toda nuestra familia junta, fue una boda que aunque fue de 300 y cacho personas, muy íntima, estaba la gente que queríamos, nuestra familia, nuestros más amigos, la verdad estuvo increíble, la gozamos desde el minuto uno”, contó Vero, quien portó un vestido de Jesús Peiró
"Fue una unión de luz pura y amor divino”.
MICHEL DOMIT, papá del novio

Para darle su toque, la artista plástica realizó una pieza a la que tituló “White Flowers” en la que estuvo inspirado el enlace y la decoración, de la mano del wedding planner José Carlos Gómez.
“Todo el menú estaba impreso con esta obra, la pista, que aunque no la pinté yo, era esa la temática, y estuvo muy padre porque pinté esa obra con mucho amor”, expresó la regiomontana.
FAMILIA DE LA NOVIA

"Lo más importante es que se traten con delicadeza y cuidado, con respeto; que no dejen a un lado la importancia de ser uno para el otro".
VERÓNICA SADA, mamá de la novia
Los ahora esposos eligieron darse el sí en el Hotel El Santuario, en Valle de Bravo, porque es un sitio que construyó el papá del novio, Michel Domit, el cual es un proyecto muy especial para él y que tiene una misión importante de espiritualidad y amor, perfecto para este momento.
La ceremonia religiosa fue oficiada por el Arzobispo Georges Saad, de la iglesia católica maronita, y se llevó a cabo en un jardín del spot.
“Al verla en el altar, sentí una felicidad extrema, verla desfilando por el pasillo fue de los mejores momentos de mi vida, se veía más guapa que nunca; aparte me encantó estar rodeado de puros seres queridos en ese momento”, destacó Daniel.

Uno de los instantes más emotivos fue cuando Vero llegó al altar del brazo de su madre, Verónica Sada, en ausencia de su padre, Gaspar Villarreal, quien ya falleció.
“Fue un momento para celebrar todo el recorrido de su vida, su infancia y juventud junto a mí, y el inicio de una nueva etapa de creación de su
propia familia junto a Daniel, su independencia y el reto de construir juntos su futuro”, dijo su mamá.
Después de la ceremonia, los asistentes disfrutaron de la música del grupo ambiental Wang Perro y de las mezclas del DJ Ezquerro, fuegos pirotécnicos y un saxofonista.

“Definitivamente, creo que es el momento más importante, ya que de aquí en adelante es
nuestra vida y la iremos construyendo juntos”, agregó Daniel, co fundador y CEO de The Robox.
Para el baile, el novio y su mamá, Rosa María Sayeg, bailaron al ritmo de “Count on Me”, de Bruno Mars, y como sorpresa, “Happy”, de Pharrell Williams, uno de los highlights más divertidos.
Por otra parte, Vero hizo lo propio con su abuelo, Rogelio Sada, con un tema de Frank Sinatra, y con su hermano, Gaspar, “Ain’t no Mountain High Enough”, de Marvin Gaye.
“Lo que más disfruté fue verlos tan felices, pero también de ver a mi nieto, Gaspy, súper gozando la fiesta y sentir a todos los que nos acompañaron, contentos y amorosos”, dijo Vero Sada, mamá de la novia.


La obra ‘White Flowers’ que pintó Vero fue la inspiración para la boda y representó lo que los novios querían para este día. Una paleta de colores alegres que hace que las flores en color amarillo y blanco sean las protagonistas.



El wedding planner José Carlos Gómez fue el encargado de desarrollar el concepto de la mano de los novios y para complementar su idea utilizó materiales como barro, yute y lino, los cuales hicieron que la decoración luciera en un ambiente natural y campirano.

Estos highlights forman parte importante en su historia de más de dos años de relación

