La caída récord de los homicidios en El Salvador se debe a un presunto pacto secreto entre el Gobierno de Nayib Bukele, que llegó al poder en 2019, y las tres pandillas más fuertes en el país, Mara Salvatrucha (MS-13), Barrio 18 Revolucionarios y Barrio 18 Sureños, según pruebas difundidas por el medio local El Faro.
Estados Unidos también alega que el Presidente salvadoreño compró el apoyo de estos grupos criminales con beneficios financieros y privilegios para sus líderes en prisión.
Expertos señalan que el supuesto pacto se ha roto, lo que podría explicar el alza de los homicidios el fin de semana pasado, con un total de 87.
Checa cómo surgieron estos grupos criminales, así como los detalles del acuerdo.