Aunque ya eran altos, los precios del gas en Europa se han disparado desde que el Presidente ruso, Vladimir Putin, anunció planes para que los países importadores paguen el gas natural ruso en rublos en lugar de dólares y euros.

A continuación, explicamos las implicaciones de la medida y el porqué muchos están desconcertados por la demanda de Rusia, lanzada en respuesta a las sanciones occidentales por su invasión a Ucrania.

¿QUÉ PROPONE PUTIN?

Europa importa grandes cantidades de gas natural ruso para calentar hogares, generar electricidad y combustible para la industria, y esas importaciones se han mantenido a pesar de la guerra en Ucrania.

Alrededor del 60 por ciento de las importaciones se pagan en euros y el resto en dólares.

Este jueves, el Kremlin publicó un decreto en el que detalla el procedimiento para pagar el gas. Bajo los nuevos lineamientos, los países “hostiles” pueden seguir pagando el gas natural en moneda extranjera a través de un banco ruso que la convertirá a rublos.

Pero en un tono más belicoso, el Presidente Vladimir Putin aclaró que a partir del viernes Rusia empezará a aceptar pagos en rublos y se suspenderán los contratos si los compradores no aceptan las nuevas condiciones.

“Para comprar gas natural ruso, deben abrir cuentas en rublos en bancos rusos. En estas cuentas se efectuarán los pagos por el gas entregado a partir de mañana”, dijo Putin en declaraciones por televisión.

El decreto firmado por Putin y publicado por la agencia noticiosa estatal RIA Novosti dice que un banco designado abrirá para cada cliente dos cuentas, una en moneda extranjera y una en rublos. Los compradores pagarán en moneda extranjera y autorizarán al banco a comprar rublos con ese dinero, los que se depositarán en la segunda cuenta como pago formal del gas.

Si no se realizan estos pagos, lo consideraremos un incumplimiento por parte de los compradores, con todas las consecuencias que ello conlleva. Nadie nos vende nada gratis, y nosotros tampoco vamos a hacer caridad, es decir, los contratos existentes se suspenderán

¿QUÉ EFECTOS TENDRÍA EL PLAN?

Los países importadores tendrían que encontrar un banco que cambiara euros y dólares por rublos. Esto podría ser complicado porque bancos rusos han sido bloqueados o expulsados del sistema de mensajería SWIFT que facilita los pagos internacionales.

Aún así, hay algunos bancos que no han sido relegados y, por ahora, las sanciones impuestas por Estados Unidos que prohíben las transacciones bancarias contienen excepciones para los pagos de energía. Esa es una concesión a los aliados europeos que dependen mucho más del petróleo y el gas rusos y temen que un corte total pueda llevar su economía a la recesión.

Pagar a Rusia por el gas en su propia moneda ayudaría, en el mejor de los casos, marginalmente a eludir las sanciones financieras, aumentar el valor del rublo o proteger la economía rusa, dijo Eswar Prasad, profesor de política comercial en la Universidad de Cornell y ex funcionario del Fondo Monetario Internacional.

Advirtió además que la medida “podría enturbiar aún más los mercados energéticos mundiales al exacerbar las interrupciones actuales del suministro y aumentar la incertidumbre sobre los suministros futuros, lo que podría sumar más aumentos de precios”.

O Putin está recibiendo terribles consejos económicos o se está descarrilando aún más en su odio por Occidente. Sería más barato para los importadores extranjeros pagar las exportaciones de Rusia en una moneda cuyo valor se está derrumbando, pero es difícil adquirir rublos y realizar pagos de una manera que evite las sanciones”.

¿CÓMO RECIBIÓ EUROPA LA DEMANDA?

Poco después del anuncio de Putin de este jueves, el Canciller alemán Olaf Scholz dio una respuesta evasiva. Declaró que los contratos vigentes establecen que los pagos se efectúan principalmente en euros y a veces en dólares, y que le aclaró a Putin en una conversación telefónica el miércoles que “así seguirá”.

“Cuáles son sus ideas para que esto suceda lo estudiaremos ahora cuidadosamente”, dijo Scholz a la prensa en Berlín. “Pero en todo caso lo que vale para las empresas es que quieren y podrán pagar en euros”.

Previamente, el Primer Ministro italiano Mario Draghi dijo que Putin le había asegurado que Europa no estaría obligada a pagar el gas en rublos, lo que disipó los temores de que Moscú cortaría el suministro de gas utilizado para calefacción y electricidad.

Según Draghi, Putin le aseguró durante una llamada telefónica de 40 minutos el miércoles que “los contratos existentes seguirán vigentes… Las empresas europeas pagarán en dólares y euros”

¿CUÁL ES EL OBJETIVO DE PUTIN?

En teoría, exigir pagos en rublos podría respaldar la demanda de la moneda y su tipo de cambio. Pero no por mucho, afirmó Prasad. Actualmente, ya se están utilizando euros y dólares para comprar rublos cuando Gazprom intercambia sus ganancias extranjeras.

El Centro de Estudios Orientales de Varsovia ha sugerido que al trasladar el flujo de moneda extranjera de Gazprom al sistema bancario mayoritariamente controlado por el Estado, el Kremlin obtendrá un control adicional sobre las divisas extranjeras que se han vuelto más escasas desde que los países occidentales congelaron gran parte de las reservas de Rusia en el extranjero.

Sin embargo, eso dejaría a Gazprom sin divisas para pagar la deuda externa o comprar suministros en el exterior. Tal como está, el proveedor de gas ya tiene que vender el 80 por ciento de su moneda extranjera al Banco Central de Rusia.

La disputa del rublo ha generado preocupaciones de que podría conducir a una interrupción en el suministro de gas natural. De suceder así, Rusia podría ser acusada de no cumplir con los contratos de energía a largo plazo, algo que sí ha hecho hasta la fecha.

Otra complicación es que el sistema de oleoductos de Europa está muy conectado, por lo que cualquier intento de restringir los flujos a algunos países afectaría a los demás, según analistas de Rystad Energy. Más allá de eso, las ventas de energía son una fuente clave de ingresos para Rusia.

Cuando se le preguntó si Rusia podría cortar el suministro de gas a los clientes europeos si rechazan la demanda de pagar en rublos, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo a los periodistas que “claramente no vamos a suministrar gas gratis”.

Dos días después, Peskov dijo que el cobro en rublos llevaría tiempo y sería un proceso gradual. Eso “podría darle tiempo a Europa para buscar alternativas y recargar reservas”, dijo Craig Erlam, analista de mercado para el Reino Unido, Medio Oriente y África en el corredor de divisas Oanda.

¿QUÉ TAN REAL ES LA AMENAZA?

El Gobierno alemán declaró una alerta temprana de emergencia energética. El Vicecanciller Robert Habeck dijo este miércoles que la medida era preventiva pues Rusia seguía cumpliendo completamente con sus contratos hasta la fecha. No obstante, apeló a las compañías y a los hogares a empezar a reducir su consumo de gas natural.

“Han habido varios comentarios del lado ruso de que si esto (el pago en rublos) no sucede, entonces los suministros se detendrán”, dijo Habeck a reporteros en Berlín.

Un equipo especial de crisis empezará a monitorear los suministros de gas en la primera de tres fases de emergencia. La fase final significaría que los reguladores del Gobierno decidirían qué usuarios industriales se quedarían sin gas y aunque los hogares y hospitales estarían libres de los recortes, representaría un golpe para la economía que ya sufre por la alta inflación y los cuellos de botella en las cadenas de suministro.

Es posible que Putin esté fingiendo. Rusia ya había amenazado con usar rublos para pagar a inversores extranjeros que tienen bonos del Gobierno dominados en dólares. Sin embargo, continuó pagando en dólares después de que agencias calificadoras dijeran que hacerlo en rublos implicaría un impago.

En cuanto a los pagos de gas, Putin puede exigir rublos, pero los contratos son claros, dijo Carl Weinberg, economista jefe y director de High Frequency Economics.

Su única opción para forzar un cambio es rehusarse a entregar los productos, y eso no puede pasar. No puede evitar que el petróleo y el gas salgan del suelo sin tapar los pozos, y la capacidad de almacenamiento se llenará muy rápido si los envíos se detienen. Rusia no puede dejar de enviar productos más de lo que Alemania y la UE pueden dejar de comprarlos”.

¿POR QUÉ ES IMPORTANTE LA ENERGÍA EN LA GUERRA?

La economía europea sigue dependiendo en gran medida de Rusia para el 40 por ciento de sus importaciones de gas y el 25 por ciento de su petróleo.

Estados Unidos y el Reino Unido han dicho que dejarán de comprar petróleo ruso, y Polonia también dijo que dejará de comprar petróleo y carbón rusos este año.

Sin embargo, Europa en su conjunto depende mucho más de la energía rusa que Estados Unidos y el Reino Unido, y los líderes se han alejado de un boicot en todo el continente. Se han centrado en planes para reducir sus importaciones durante los próximos años a través de las reservas, uso de otras fuentes de energía y un viraje hacia la energía eólica y solar lo más rápido posible.

Las estimaciones del impacto de un corte total de gas en Europa varían, pero generalmente implican una pérdida sustancial de producción económica.

Alemania, la economía más grande de Europa, obtiene de Rusia más de la mitad de su gas natural para uso doméstico, generación de electricidad e industria.