BÚSQUEDA DOBLE

Cecilia no olvida a sus hijos: Alejandro, quien desapareció en 2015, a la edad de 21 años, y Marco Antonio, a quien se le vio por última vez en el 2019, desde entonces comenzó una búsqueda que la llevó a fundar el colectivo “Madres Buscadoras de Sonora”.

La búsqueda de sus dos “tesoros” la ha llevado a escarbar en brechas, zonas despobladas y urbanas en varios estados del País.

LOS POSIBLES HALLAZGOS

El 10 de abril, el celular de Cecilia timbró.

Al responder, una voz del otro lado le notificó que los restos de su hijo Alejandro podrían ser los hallados en la comunidad de Juan José Ríos, en Guasave, Sinaloa, lugar en el que ella misma realizó los descubrimientos.

Cuatro días más tarde, en una búsqueda en la que participó junto a otras integrantes del colectivo, encontró en la Colonia La Costa, en Hermosillo, Sonora, una osamenta que podría corresponder a su otro hijo, Marco Antonio. 

Ese mismo día, publicó en su cuenta de Twitter la fotografía del maxilar de la osamenta encontrada en la Costa y escribió que reconocía en él a su hijo.

Traigo un nudo en la garganta. Creo que encontré a mi hijo Marco en la búsqueda de hoy. Reconozco su dentadura y forma de cráneo. Siento que me derrumbo”.

SENTIMIENTOS ENCONTRADOS

La sensación que los hallazgos han provocado en Flores es ambivalente. Por un lado, está el hecho de que al fin haya encontrado a sus hijos; pero, eso sería la confirmación de que ya nunca más los volverá a ver.

Creo que ahí es donde empieza el dolor por dentro, porque termina la esperanza de encontrarlos con vida".

Además del dolor, también está curtida en la frustración, pues en el caso de Marco Antonio, esta es la tercera vez que le dan información de la presencia de restos que resulta positiva.

En las dos ocasiones anteriores, los resultados de ADN salieron negativos.

Me dijeron que si iba a ese lugar iba a encontrar lo que buscaba y lo que yo busco es mi hijo, entonces, espero que sí sea y si no, pues igual, es uno de los tantos hijos que adopté cuando desaparecieron los míos”.

LOS PERITAJES

La Fiscalía General de Justicia de Sonora confirmó el hallazgo de la osamenta e informó que iniciaría con los peritajes para determinar la identidad.

Mientras tanto, en Sinaloa, la Fiscalía ya comenzó con el estudio genético de los restos encontrados y deberá compartir los resultados con las autoridades federales que están llevando su caso.