Entre las víctimas del tiroteo en un supermercado Tops de Buffalo, Nueva York, había personas que hacían sus compras cotidianas y cuatro empleados de la tienda, incluido un guardia de seguridad.
Todavía se desconoce mucho sobre las 10 personas murieron por los disparos de Payton Gendron, un hombre de 18 años que atacó por motivos racistas a una comunidad negra.
Estas son las personas que la Policía ha identificado hasta el momento.
Ruth Whitfield, 88 años
Durante 50 años, Ruth Whitfield fue leal feligresa de la iglesia Durham Memorial A. M. E. Zion, donde cantaba en el coro, según dijo su nuera Cassietta Whitfield.
Había vivido en Buffalo por más de cinco décadas y tuvo cuatro hijos. En los últimos años, se había hecho cargo del cuidado de su marido, que estaba en un asilo de ancianos.
Whitfield tenía ocho nietos.
“Era una mujer religiosa que se preocupaba profundamente por su familia”, dijo Cassietta Whitfield.
Roberta Drury, 32 años
Roberta Drury se dirigía al supermercado Tops a comprar productos para la cena, según contó su hermana.
“Era muy vibrante”, dijo Amanda Drury.
“Siempre fue el centro de atención y hacía que todo el cuarto sonriera y se riera”.
Aaron Salter Jr. 55 años
Aaron Salter era un oficial retirado del Departamento de Policía de Buffalo y trabajaba como guardia de seguridad en la tienda Tops donde ocurrió el ataque desde que dejó la Policía.
Descrito como un “héroe” por el comisionado del Departamento de Policía de Buffalo, Salter se enfrentó al atacante e intercambió disparos con él cuando entró al supermercado el sábado por la tarde.
Los disparos de Salter alcanzaron al sospechoso, pero el hombre llevaba un chaleco antibalas que detuvo la bala.
“Estuvo en la fuerza policial durante 30 años y nunca sucedió nada como esto”, dijo su hijo, Aaron Salter III.
“Solo estaba haciendo un trabajo de seguridad, y ese tipo tuvo que entrar allí y tomar todas estas vidas inocentes sin ninguna razón”.
Celestine Chaney, 65 años
Celestine Chaney murió durante el tiroteo, reveló su hijo, Wayne Jones, de 48 años.
La mujer estaba visitando a su hermana y las dos fueron al supermercado porque Chaney quería comprar fresas para hacer pastelitos, que le encantaban, dijo Jones.
Durante el tiroteo, la hermana de Chaney llegó al congelador, contó Jones, “pero mi mamá realmente no puede caminar como solía hacerlo. Básicamente no puede correr”.
Chaney fue madre soltera y trabajó en una empresa de trajes. Luego, antes de jubilarse, fabricaba gorras de béisbol. Jones era su único hijo y tenía seis nietos.
“Es un poco loco que ella estuviera allí de compras, porque vamos de compras juntos”, añadió su hijo.
Heyward Patterson, 65 años
Heyward Patterson conducía diariamente al supermercado, llevando a la gente por menos dinero del que gastarían en un taxi, dijo su nieta Teniqua Clark.
Así era como ganaba dinero para apoyar a sus tres hijos, dijo, por su parte, Terrell Clark, su sobrino.
Estaba ayudando a otra persona a guardar las compras en la cajuela del automóvil cuando lo mataron, añadió.
“Ni siquiera tuvo la oportunidad de correr”, dijo. “No tuvo ninguna oportunidad en absoluto”.
Patterson, que había vivido en el área de Buffalo toda su vida, era una persona amable que estaba “orientada a la familia” y le encantaba cantar en la iglesia, recordó su sobrino.
“Que esto le sucediera a él, especialmente si se trata de un crimen de odio con perfil racial, nunca pensé que sería él”, expresó Terrell Clark
Katherine Massey, 72 años
Katherine Massey era conocida por su lucha por los derechos civiles.
Hace casi un año, después de que el primo de un legislador estatal recibiera un disparo mortal cerca de la oficina de distrito del legislador, Massey había escrito una carta al editor de The Buffalo News pidiendo medidas federales más estrictas para el control de armas.
Pidió más responsabilidad para los fabricantes y vendedores de armas de fuego.
“Es necesario que haya una amplia acción/legislación federal para abordar todos los aspectos del problema”, escribió.
Margus Morrison, 52 años
Tenía tres hijos y fue descrito por su familia y amigos como “una buena persona que nunca se metió con nadie”.
Geraldine Chapman Talley, 62 años
Su sobrina, Kesha Chapman, la definió como un alma gentil que amaba a todos.
Añadió además que siempre estaba sonriendo y que no le gustaba la confrontación.
Dejó a sus dos hijos adultos.
Andre Mackniel, 53 años
Según sus familiares era un padre, hermano, tío y amigo amoroso.
De acuerdo con su hermano, estaba en el supermercado comprando un pastel para su hijo que acababa de cumplir tres años.
Pearl Young, 77 años
Era una persona religiosa, y una figura clave en la Iglesia de Dios en Cristo, según los reportes.
Durante 25 años ayudó a alimentar a las personas necesitadas del vecindario de Central Park.
Era madre, abuela y misionera. Le encantaba bailar, cantar y estar con su familia.