La rutina de los corredores no consiste solo en devorar kilómetros, hidratarse, comer bien y descansar. También incluye una labor importante: la higiene de los tenis con los que se entrena y compite.
El calzado deportivo debe lavarse cada dos o tres semanas y dejarlo secar por completo antes de volverlo a utilizar. Sin embargo, no se trata solo de lavarlo, se deben seguir ciertas recomendaciones tanto para la comodidad de los pies como para la duración de los tenis.
Independientemente de que los laves, ten presente que después de 400-500 kilómetros, el calzado por running empiezan a perder capacidad de amortiguación. Por eso es obligada una revisión de la suela regularmente, ya que, si el desgaste es muy notorio o disparejo, es señal de que hay que cambiarlos.