De 54 años y nacido en Oaxaca, pero con una carrera política hecha en Puebla, Casique Zárate fue el secretario de Elecciones del Comité Ejecutivo Nacional del PRI y al que le tocó responder por la derrota en Campeche, Estado que perdió el partido a manos de Morena en junio del año pasado.

La operación política en Campeche era prioritaria. Moreno Cárdenas retiró a Casique de la Secretaría de Elecciones cuatro meses después. En su lugar, quedó el diputado mexiquense Carlos Iriarte.

Moreno quería ganar en su tierra, un bastión donde el PRI conservaba estructura y control político.

La candidatura del tricolor quedó en manos de Christian Castro Bello, sobrino de Alito Moreno.

La plaza se perdió por sólo 9 mil votos de diferencia, además de que el tricolor quedó en tercer lugar, por debajo de MC.

Hoy, el haber perdido el Estado tiene un alto costo para Alejandro Moreno porque es la nueva Gobernadora la que ha difundido escandalosas conversaciones del dirigente tricolor, las cuales han tambaleado su cargo en la dirigencia.

En uno de los tantos audios que ha dado a conocer la Mandataria morenista Layda Sansores sobre conversaciones privadas de Moreno Cárdenas, éste habla con otro hombre y le menciona que busque a Casique para colocar diversos productos con los gobernadores del partido, como despensas y medicamentos, y que con él se puede arreglar.

Tras el cambio en la Secretaría de Elecciones, el diputado Casique fue enviado a Campeche como delegado del CEN y quedó alejado de la operación política que ya se lleva a cabo en Puebla, en la disputa por la Gubernatura.

Distintas versiones en la entidad señalan que el grupo de Enrique Doger Guerrero, ex candidato del PRI al Gobierno de Puebla en 2018 y ex Alcalde de la capital estatal, estaría trabajando en el proyecto de Ignacio Mier, coordinador de los diputados de Morena, para construir la candidatura de este partido al Gobierno del Estado.

Mier y Casique, aunque en diferentes partidos, son afines a Doger. Ambos fueron dirigentes del Revolucionario Institucional en diferentes etapas.

 

Javier Casique no ha dejado de estar en medio del escándalo cuando fue involucrado en una presunta red de corrupción para presionar a alcaldes de Puebla para no ser tocados en las auditorías del órgano fiscalizador del Estado.

Aunque el Gobernador Miguel Barbosa denunció la supuesta red, no mencionó directamente al diputado del PRI, pero sugirió que ese partido estaba involucrado.