Académico, Arzobispo y Cardenal
El sacerdote Joseph Ratzinger, nacido el 16 de abril de 1927 en Marktl am Inn, en el sur de Alemania, fue nombrado en 1977 como Arzobispo de Múnich y Frisinga, y unos meses más tarde también como Cardenal, lo que le dio oportunidad de participar en el cónclave de 1978 –junta de Cardenales para elegir nuevo Papa–.
Como Cardenal, recibió al Papa Juan Pablo II en Alemania, quien lo puso al frente de la Congregación para la Doctrina de la Fe.
Sin embargo, Ratzinger fue reconocido como un teólogo puro. Gran parte de su vida la dedicó a la formación como profesor de teología en distintas universidades, incluidas la Facultad de la Escuela Superior de Filosofía y Teología, en Freising, la Universidad de Bonn, y la Universidad de Ratisbona.
Entre otras cosas, fungió como:
- Presidente de la Comisión Teológica Internacional
- Presidente de la Comisión Bíblica
Susesor de Juan Pablo II
A la edad de 78 años, el Cardenal Ratzinger fue elegido Papa el 19 de abril de 2005 tras la muerte, el 2 de abril, de Juan Pablo II. Se convirtió en el Pontífice de mayor edad en asumir después de más de 230 años.
Fue elegido en la cuarta votación del cónclave, y tomó el nombre de Benedicto XVI, por su cercanía con Benedicto XV, Papa durante la Primera Guerra Mundial.
Su elección fue interpretada como un continuismo del conservadurismo en la Iglesia.
Encuentro interreligioso
En un esfuerzo por aumentar el diálogo entre religiones, a finales de 2006 Bendicto XVI visitó la Mezquita Azul de Estambul, Turquía, donde acompañó a clérigos musulmanes en rezo silencioso, pese a las críticas entre los islamistas más radicales.
Con ello, se convirtió en el segundo Papa que entra a una mezquita y reza en ella, después de Juan Pablo II en 2001 en Damasco.
Cientos de personas islamistas protestaron contra la visita del Pontífice, a quien exigían que no entrara a Santa Sofía, la cual pedían que volviera a ser una mezquita.
En 2009, en una visita a Nazaret, Benedicto XVI mantuvo un encuentro con representantes cristianos, musulmanes, judíos, drusos y de otras religiones.
En en auditorio del santuario de la Anunciación, rezó por la paz cogido de la mano de un rabino y de la de un imán de Galilea, mientras otro rabino entonaba el Salam, Shalon.
Días antes, visitó una mezquita en Jordania, donde instó a cristianos y musulmanes a defender juntos la religión de la manipulación política.
Valores tradicionales
Contrario a los aires de cambio que representó su sucesor, el Papa Francisco, Benedicto XVI defendió durante su papado los valores tradicionales y conservadores en la Iglesia católica.
- Rechazó el llamado a un debate sobre el celibato de los sacerdotes.
- Reafirmó las prohibiciones de la Comunión para católicos divorciados que se vuelvan a casar.
- Mantuvo una visión conservadora respecto al aborto, la eutanasia y las relaciones homosexuales.
Un Papa alemán reza en Auschwitz
En una visita a Polonia, en mayo de 2006, el Papa Benedicto XVI, quien vivió el nazismo en carne propia, rindió homenaje a las víctimas del Holocausto cuando recorrió el campo de exterminio de Auschwitz.
La Segunda Guerra Mundial obligó a Ratzinger a alistarse como soldado en las filas del Ejército alemán a los 16 años. Desertó casi al final de la guerra y fue hecho prisionero. Tras el conflicto, volvió al seminario.
En su visita a Auschwitz, expresó su tristeza, arrepentimiento y amistad hacia el pueblo judío.
Al año siguiente, habló de cómo el “monstruo” del nazismo arruinó su adolescencia en un encuentro con cerca de 20 mil jóvenes en Nueva York.
Ese mismo 2007, en septiembre, igualmente visitó un memorial en Austria, Viena.
Perdón por abusos, pero sin castigos
Pide perdón en Sídney
- Julio, 2008
Durante una reunión de obispos en Sídney, Australia, en julio de 2008, el Papa pidió perdón en nombre de la Iglesia por los abusos sexuales de niños por parte de curas católicos.
Expresó "la vergüenza que hemos sentido", y llamó a los abusadores a que respondieran ante la justicia, pero no emitió medidas concretas.
Escribe a irlandeses
- Marzo, 2010
Dos años más tarde, en medio de continuas revelaciones de pedofilia al interior de la Iglesia, Benedicto escribió una carta en marzo de 2010 a los católicos en Irlanda en la que reconocía los abusos y pedía perdón a quienes sufrieron gravemente.
En la misiva afirmaba que quienes eran culpables tendrían que responder ante Dios, una acción que se quedó corta ante las demandas de los grupos de víctimas, que, entre otras cosas, pedían la admisión del encubrimiento de abusos.
Reporte lo incrimina
- Enero, 2022
Un reporte eclesiástico difundido a inicios de 2022, señaló directamente a Benedicto XVI de encubrir abusos cuando era Cardenal y Arzobispo de Múnich.
De acuerdo con el documento, Ratzinger tenía conocimiento de los abusos cometidos por sacerdotes que continuaron en actividad en distintas parroquias y puestos adscritos a la Iglesia católica alemana.
Lejos de América Latina
Benedicto XVI realizó su segunda visita a América Latina en marzo de 2012, con una gira que lo llevó a México y Cuba, en medio de críticas por el aparente olvido en que mantuvo al continente durante su mandato.
El Pontífice visitó por primera vez la región más católica del mundo en 2007, en ocasión de la V Conferencia de la CELAM celebrada en Brasil.
En sus 27 años de pontificado, su antecesor, Juan Pablo II, visitó Latinoamérica un total de 26 veces, de las cuales fue a México en cinco ocasiones, razón por la que le llamaron “el Papa mexicano”.
Visitas de Benedicto XVI
Visitas de Juan Pablo II
El primero en renunciar en 6 siglos
El lunes 11 de febrero de 2013, a la edad de 85 años y tras 8 años de mandato, Benedicto XVI sorprendió al mundo al anunciar que renunciaría al cabo de dos semanas, el primer Papa en renunciar en 598 años.
Reconoció que su condición física ya “no era la adecuada” para ejercer “del modo adecuado” el ministerio, y dijo que a partir de entonces se mantendría “en el servicio de la oración”.
El anuncio lo realizó personalmente en Latín, durante el consistorio para la canonización de los mártires de Otranto.
Pasó el resto de su vida en retiro en el acondicionado monasterio Mater Ecclesiae, en el Vaticano, en sotana blanca simple, junto a sus libros y sus discos.
Ocasionalmente recibía visitas de sus amigos clérigos, incluido su sucesor, el Papa Francisco.