La brasileña Marcia Sousa, quien también pidió omitir su nombre real, fue arrestada en 2018 en el aeropuerto de Hong Kong con 600 gramos de cocaína líquida en su sostén.
Declaró al tribunal que venía de una familia pobre del norte de Brasil, su madre necesitaba diálisis renal y recientemente había quedado embarazada. Dio a luz en prisión en espera del juicio.
La jueza Audrey Campbell-Moffat concedió a la mujer de 25 años circunstancias atenuantes por haberse declarado culpable desde el inicio, cooperar con la Policía y ser una madre ejemplar con su hijo, según los informes carcelarios.