A partir de lo material e intangible, los muros han sido símbolo de exclusión en la sociedad desde tiempos antiguos, incluso, en la actualidad.
Bajo esa premisa, con una compleja proyección escénica y una producción única, Elisa Carrillo presentó “#The_Wall”, una obra de danza contemporánea que genera un diálogo alrededor de las fronteras mediante una perspectiva tragicómica.
“Es tremendamente fuerte; creo que toca las fibras de cualquier país y persona que en este momento esté pasando por una mala situación”, comentó la filántropa, Jamehel Guerra.
“Desgraciadamente, la separación de familias, caos y muerte que se están propiciando son terribles”.
Nunca había visto a un ballet que me hiciera sentir lo de ahora; como los buenos vinos, Elisa Carrillo está extraordinaria”.
En el marco de la quinta edición del Festival Internacional de la Danza, Danzatlán, esta pieza llegó al Centro Cultural Mexiquense Anáhuac, con la dirección de Mikhail Kaniskin y coreografía de Yeri Anarika, además de la participación de Elisa Carrillo.
“Es un gran talento y excelente artista, además, es un ser humano sencillo y una ogullosa embajadora de México; siempre habla bien de su País, es algo que me encanta de ella”, mencionó Luz de María Sánchez, maestra de ballet.
En hora y media de duración, ‘#The_Wall’ contó con la participación de 14 bailarines, quienes se desenvolvieron entre juegos de luces, sonidos y proyecciones con distintas connotaciones.
