Las marcas automotrices han abierto su panorama e ingresado a industrias inesperadas como la movilidad aérea y la náutica.
Aquí te presentamos las incursiones de Mercedes-Benz y de Volkswagen en otros escenarios, que pueden ser parte de la movilidad del futuro.
Mercedes-Benz al agua
El lujo de Mercedes-Benz no se quedó con ganas de explorar el mar.
Si la firma alemana imprimía su estilo en las pistas, en las calles y hasta en las rutas todoterreno con sus distintos modelos de autos, no había por qué quedarse atrás en altamar.
Y es que Mercedes-Benz ya cuenta con un par de exclusivos yates, que todo aficionado a la marca debe tener, aunque para ello necesite desembolsar más de 30 millones de pesos.
Desde 2017, la firma de las flechas plateadas colaboró con la empresa monegasca Silver Arrows Marine para fabricar un par de navíos que tuvieran como inspiración los vehículos alemanes.
El más destacado de ellos fue el Arrow 460-Granturismo, un yate inspirado en los autos de competición de Mercedes-Benz de los años 30, pues cuenta con el característico color plata, forma cupé y hasta ventanillas retráctiles que dan la sensación de ir en un convertible.
El yate, que salió a la venta a un costo de 32 millones de pesos, tiene destacados elementos como vidrio inteligente cuya opacidad se puede nivelar, terraza posterior con salida al mar, sistema de audio de alta calidad, aire acondicionado y una bodega de vinos.
El Arrow 460-Granturismo tiene una velocidad máxima de 36 nudos, unos 66 kilómetros por hora, números que se logran gracias a su potencia de 947 caballos.
Este vehículo forma parte de la división Mercedes-Benz Style que desde el 2010 ha tenido como objetivo llevar el ADN de la firma a entornos fuera de las pistas, algo que han impreso en yates, helicópteros, cabinas de jets y hasta departamentos.
Volkswagen en el aire
Las propuestas de movilidad para el futuro no tienen límites, y Grupo Volkswagen ha despegado hacia el cielo presentando su nuevo concepto de transporte volador llamado V.MO.
Este eVTOL o también conocido como dron para pasajeros, es el primer ejercicio de la firma alemana que muestra el camino en el que están trabajando rumbo al futuro de la movilidad sobre las alturas.
El V.MO es al momento un prototipo y consta de 8 motores eléctricos para una propulsión en vertical. Adicional, cuenta con otros dos motores que permiten que su movimiento sea en forma horizontal.
Este innovador vehículo de 11.6 metros de longitud y 10.6 de ancho se mueve a través de una conducción autónoma y ofrece hasta 200 kilómetros de distancia. El interior está diseñado para transportar a cuatro pasajeros, cada uno con su propio equipaje.
Las primeras pruebas de vuelo se estima que sucedan en el 2023 con un modelo mejorado al que se está presentando ahora.
Cruzan el green
El golf es uno de los deportes que más ha ganado popularidad en los últimos años y hay un elemento indispensable en esta disciplina: los carros.
Estos vehículos comenzaron siendo eléctricos, pero su capacidad de adaptación a otros escenarios como resorts, countries privados y hasta a la misma calle, los llevaron a tener un motor de combustión. Es por ello que firmas como Mercedes-Benz, ya ha tenido colaboraciones con otras firmas para construir modelos de este tipo.
Actualmente, los más comunes llevan un motor de gasolina a cuatro tiempos y de un cilindro, que es enfriado por aire; en cuanto a potencia, los modelos van de los 12 a los 20 caballos, alcanzando una velocidad no superior a los 40 km/h.
Además, hay carritos de golf de tracción delantera o 4×4, debido a las condiciones que existen en los campos, pues hasta los coches pueden caer en las trampas de arena.
También hay distintas capacidades pues hay buggies para dos, cuatro, seis y ocho pasajeros, además de otros no tan comunes que pueden llevar a 14 y 23 personas.
El costo del carrito para dos personas suele iniciar en 200 mil pesos, mientras que si se elije uno para cuatro, el valor supera los 300 mil pesos.
Andrés Muñoz y Francisco Esquivel
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