En diciembre de 2018, la famosa regresó a México para ofrecer una rueda de prensa, en la que declaró que no estaba enferma, que no era cleptómana, ya que en distintos medios eso se había asegurado.
Dijo también que su arresto y acusación había habían sido una injusticia.
Entre lágrimas expresó el daño psicológico y físico que le habían causado.
“He vivido la experiencia más difícil de mi vida. He sido juzgada, crucificada y señalada, derrotada y humillada”, dijo llorando.
La artista también manifestó que esa bochornosa situación le hizo perder varias ofertas de trabajo, aunque no quiso mencionar los nombres de los proyectos.