Los cambios sociales no están exentos del ojo del cantinero, como cuando el público femenino tuvo libre acceso en la década de los 80’s; a pesar de que algunos espacios fueron forjados por mujeres, como el caso de Los Famosos Equipales, barra que cerró el 28 de febrero pero reabrió el 21 de julio, gracias a la campaña “Borrachos Samaritanos” que le permitió a la familia Partida recaudar fondos para sanear el techo y otras necesarias adecuaciones.
“Oficialmente, la cantina surgió en 1920, en la calle González Ortega y Joaquín Angulo. Antes de eso, unos cinco años aproximadamente, mis abuelos Juan Parida y Carmen Mancilla vendían alcohol con refresco en lo que se conocía como tendejón, tenían solo una mesita y cuatro equipales. La gente los empezó a ubicar por los equipales pero mi abuelo falleció y a mi abuela le retiraron la renta del lugar porque no era bien visto que una mujer vendiera alcohol”, rememora María Luisa Partida.
Viuda, con siete hijos y sin trabajo, Carmen comenzó a vender canelita con piquete afuera de su casa y luego se estableció formalmente en la calle Angulo, ya con ayuda de su hija Cata Partida. Pero en 1940 tuvieron que cambiarse a la actual dirección porque abrieron la escuela M. Diéguez.
“A pesar de que el negocio siempre ha sido liderado por mujeres de la familia, a mi mamá no le encantó la entrada del público femenino porque estaba acostumbrada a los hombres y a que la obedecieran siempre. Ella traía la escuela del machismo y queriendo proteger a las mujeres no las dejaba sentarse en la barra, pero no la obedecían porque se sentían discriminadas. Tuvimos que hablar con ella y la convencimos. Ahora vienen más mujeres y el ambiente es muy familiar”, agrega.