Robert Lewandowski mostró que no es perfecto si se le atraviesa una de sus tardes negras.
El delantero polaco falló un penal ayer con el Barcelona, en el duelo de LaLiga frente al Almería.
Increíblemente, el atacante culé estrelló el balón en el palo izquierdo de la portería tras cobrar la pena máxima con un pequeño salto antes de patear el esférico.
Tampoco estuvo fino en varios momentos del partido con el último toque, por lo que se fue sin goles, con una participación más que discreta en el Camp Nou.