Los centros de rehabilitación contra adicciones a las drogas operan con desorden en Nuevo León.
Estos establecimientos privados funcionan sin que Salud haya emitido un reglamento y lo hacen en lo oscurito, ya que el padrón de lugares autorizados no es público, además de que la dependencia asegura desconocer la cantidad de pacientes internados, de acuerdo con una investigación de EL NORTE.
Además, Salud estatal tiene 126 establecimientos registrados, pero organizaciones como Documenta estiman que hay cerca de 500 en el estado, la mayoría clandestinos, que deberían ser vigilados por los apenas ocho inspectores de la Subsecretaría de Regulación y Fomento Sanitario, de Salud.
EL NORTE hizo un mapeo de los 126 centros de rehabilitación que aparecen en el padrón estatal.