Esta visión festiva ecológica tiene popularidad desde el año pasado.
Verdes claros se añaden a una paleta predominantemente blanca y los detalles en café amaderado, terracota y dorado agregan calidez a los diseños. El resultado es una estética fresca y natural.
Si se busca un ambiente aún más natural, se pueden suavizar los tonos más claros y contrastar con una variedad de colores verdes con colores marrones oscuros y terrosos. Los detalles en negro mate y dorado dan pie a una versión moderna de un estilo rústico.
No deben dejarse de lado las texturas naturales populares como la piedra, el lino, la madera y el corcho, ya que agregan profundidad.