En el marco de la conmemoración de los 500 años de presencia judía en México y 70 de relaciones diplomáticas entre esta nación e Israel, se inauguró el monumento “Viento”, mismo que fue donado por la Fundación HispanoJudía (FHJ) y la Fundación José Sacal.
“Mi entrañable esposo estaba convencido que el arte es esencial para el desarrollo de cualquier sociedad, pues es el idioma universal de la paz”, mencionó Sylvia Sacal, presidenta de la Fundación José Sacal.
“El maestro, además de estar orgulloso de su trabajo, plasmó en esta obra su herencia; la escultura ‘Viento’ nos habla de la resiliencia del pueblo judío mostrándonos una figura humana de rasgos estilizados, aristas agudas y líneas depuradas a su estilo estético y es una pieza que se eleva hacia el cielo levantándose por encima de cualquier contrariedad, anteponiéndose a históricas dificultades y retos que no detienen su pasó a través del tiempo”.