Desde la Primavera Árabe hasta las protestas en Irán, pasando por los movimientos #Metoo o #Blacklivesmatter, Twitter se ha consolidado como una plataforma global para activistas y opositores políticos, que corren el riesgo de perder una importante herramienta de movilización si la red desaparece.
De acuerdo con Mahsa Alimardani, investigadora de la organización de defensa de la libertad de expresión Artículo 19, existen otras plataformas, pero Twitter “es claramente muy influyente a la hora de permitir que los medios y los líderes presten atención a lo que ocurre en el mundo”.
November 24 - Zarrinshahr, central #Iran
— sahramkia (@sahramkia) November 24, 2022
Locals are rallying in support of their compatriots in the country's Kurdish cities on this 70th day of the uprising.#IranRevolution2022#كردستان_تنها_نیست pic.twitter.com/yCiZ24qZIR #BlacklistIRGC
En los últimos días se difundieron en Twitter imágenes de una protesta en China en la mayor fábrica de iPhone del mundo.
Escenas surrealistas en #China 🇨🇳
— Tte.Dan 🪖 (@kozako01) November 24, 2022
Los trabajadores chinos encerrados en la fábrica #Faxcoon que produce #iPhone para #Apple se rebelan contra las restricciones de Covid, la mala alimentación y las horas extras no pagadas. pic.twitter.com/x35ceUpjsa
Y en el pasado, la red social sirvió para explicar la Primavera Árabe, el movimiento prodemocrático de Hong Kong o la guerra civil en Siria, mostrando a menudo la cruda realidad de la represión de los regímenes autoritarios.
Pese a no tener la misma cantidad de usuarios que otras redes sociales, Twitter es imprescindible para muchos medios, empresas y famosos que a veces sólo tienen este canal para comunicarse.
Twitter ha jugado un papel clave en la promoción de fenómenos sociales como #Metoo, para denunciar la violencia sexual, o #Blacklivesmatter, para denunciar la violencia policial contra los afroamericanos en Estados Unidos.
A decir de Michaelsen, con Twitter los activistas pueden llegar fácilmente a periodistas o líderes políticos, de forma más directa que en otras redes como Instagram.
Sin embargo, desde su adquisición por parte del multimillonario Elon Musk, la red del pájaro azul se ha visto profundamente desestabilizada e incluso amenazada de desaparición, para disgusto de muchos usuarios que, en ocasiones, han tardado años en crear una audiencia.