En la primera parte, la cantante se refiere a la mamá de Piqué (Montserrat Bernabeu Guitart), a quien el jugador le construyó una casa a la par de la de ellos, en uno de los barrios más exclusivos de Barcelona.
Mientras que la segunda, tiene que ver con un proceso tributario que arrastra la intérprete, donde hacienda española la acusa de fraudar al fisco español entre los años 2012 y 2014 por varios millones de euros, ya que ella aparecía como no residente de España cuando sí vivía en la entidad y por lo tanto debería pagar impuestos.
Shakira ya pagó parte de la deuda y una multa, pero se dice que esta deuda tributaria fue a causa de los problemas económicos que tuvo Piqué, los cuales cubrió la famosa.