"La actividad física es increíblemente beneficiosa para tu cerebro. Los estudios han demostrado esto una y otra vez. Puede mejorar la cognición, la memoria y el sueño, así como reducir la ansiedad y la depresión, todo esto fomenta la salud del cerebro".
Dra. Tanu Garg, neuróloga del Hospital Houston Methodist
LOS BENEFICIOS
- Quienes hacen de la actividad física un hábito reducen considerablemente el riesgo de desarrollar algún tipo de demencia. En cambio, quienes tienden al sedentarismo tienen el doble de probabilidades de experimentar un deterioro cognitivo subjetivo (empeoramiento o confusión más frecuente o pérdida de memoria), de acuerdo con estudios científicos.
- Practicar ejercicio con regularidad reduce el riesgo de un accidente cerebrovascular (popularmente conocido como derrame cerebral), esto es cuando se bloquea el flujo de sangre en el cerebro. El accidente cerebrovascular puede causar daño cerebral en tan solo minutos y es una de las principales causas de muerte en el mundo.
"Tu corazón suministra de sangre a tu cerebro, por eso para conservarlo joven es importante mantener tu sistema cardiovascular sano. La arterioesclerosis (acumulación de grasas, colesterol y otras sustancias en las paredes de las arterias, incluyendo los vasos sanguíneos que suministran la sangre de tu cerebro) puede causar obstrucciones que incrementan el riesgo de un accidente cerebrovascular".
Dra. Tanu Garg, neuróloga del Hospital Houston Methodist
TRES BÁSICOS
Aunque los desafíos matemáticos, juegos de palabras y acertijos le gustan al cerebro, cuando se trata de un cerebro sano hay que sumar otras medidas, aconseja la neuróloga Garg.
"Cuando se habla de la salud del cerebro, pienso en la salud integral de todo el cuerpo: cuidarse tanto física como mentalmente. Tu cuerpo trabaja en conjunto. Cuando algo no funciona correctamente, ya sea tu corazón, tus riñones o en algún otro lugar, eventualmente afectará a tu cerebro".
Dra. Tanu Garg, neuróloga del Hospital Houston Methodist
Haz del ejercicio un hábito
La meta es realizar 150 minutos de actividad moderada por semana, como una caminata vigorosa, aunque inclusive 10 minutos al día pueden marcar la diferencia.
Come sano
Disminuye la comida procesada con azúcares añadidas o grasas saturadas y prioriza los alimentos saludables (verduras, carne magra, granos integrales, grasas saludables). No olvides controlar las porciones.
No permitas que tu salud mental se deteriore
Mantén una visión positiva y optimista, toma medidas para reducir el estrés innecesario y no ignores los signos de ansiedad y depresión.