El combinado nacional otra vez se quedó en la orilla, siendo víctima nuevamente del anfitrión del torneo en el 2001.
Ya con una nueva generación y grandes nombres como Jared Borguetti, Jesús Arellano o Daniel Osorno, la Selección venció a Chile y Uruguay en Cuartos y Semifinales respectivamente, sólo para enfrentarse a su “coco” poco después.
Y esa bestia negra de México no era un país, si no la instancia Final, misma a donde ya había llegado dos veces en el pasado y la cual le volvió a negar la gloria en esta edición.
Los dirigidos por Javier Aguirre cayeron por la mínima en el partido con el título, a manos de Colombia, selección que pudo festejar el campeonato en su casa.