Foto: Sergio Olvera

El 10 de septiembre de 2022, la vida de Eduardo del Villar dio un doloroso giro tras recibir la triste noticia del fallecimiento de su hermano menor, Fernando, a raíz del consumo de sustancias tóxicas.
“Nada es real” fue uno de los últimos mensajes que escribió el joven abogado, egresado del ITAM, luego de consumir alcohol y hongos alucinógenos, los cuales le desarrollaron un episodio psicótico que lo orilló a aventarse del piso 22 del edificio donde vivía.
“Esa noche lo alcancé en una fiesta, él ya se había comido los chocohongos, no me dijo, lo intuí por su comportamiento; lo fui a dejar a su departamento a las 2:00 de la mañana, y, al día siguiente, uno de sus amigos me confirmó lo que había consumido”, detalló Eduardo, quien se licenció en Finanzas, también en el ITAM.
Sin saber los efectos negativos de esta droga, Eduardo confiesa que él mismo la probó alrededor de siete veces, pues le parecía inofensiva al alterar su conciencia de forma satisfactoria.
“Los sentidos se potencializan, puedes estar más en contacto con tus sentimientos, si estás en una fiesta pasándola bien, te sentirás mejor, pero, después de este doloroso suceso, me he dado a la tarea de informarme, y su consumo es totalmente nocivo”, explicó.
“Te hace salir de la realidad, te puede pasar la primera vez que lo pruebes o después de la decimoquinta, es una ruleta rusa que depende de tu alimentación, emociones y contexto de ese día”.
Luego de exponer públicamente su tragedia familiar, el joven de 29 años comentó que algunas personas se han acercado a él para compartirle diversas experiencias, las cuales son similares.
“Es como si estuvieran en una completa simulación de la que quieren salir; por ejemplo, imaginan que están en un hotel incendiado, en un juego, o que deben matar al diablo, son muchísimos casos que llegan al mismo final: el suicidio u homicidio”, mencionó.
Es por esto que Eduardo asegura que su hermano no se quitó la vida por un estado anímico, pues había tenido un gran año, consecuencia de una personalidad saludable y exitosa.

Fernando disfrutaba realizar caminatas y estar rodeado de la naturaleza / Foto: cortesía.
"La vida de mi hermano habla mucho más que su muerte, la culpa y la vergüenza no están presentes, lo que quiero es seguir adelante y apoyar a los demás".
Eduardo del Villar
Gratos recuerdos

Eduardo del Villar comparte algunas fotografías con su hermano menor, Fernando.

En junio de 2022, Eduardo celebró la titulación con mención honorífica de su hermano en el ITAM / Foto: cortesía.
Los hermanos disfrutaron de su última Navidad juntos en 2021 / Foto: cortesía.

“Su vida habla por sí sola, desde preparatoria tuvo un excelente promedio, fue un excelente amigo, deportista, nació con estrella, y por ello tocó muchas vidas, después se graduó de Leyes con mención honorífica”, ahondó.
“No debía dinero, ni se medicaba, ni tenía depresión, ni había cortado con la novia, él vivía con dos de sus mejores amigos, lo acababan de ascender en el trabajo; sí, sus autoexigencias eran muy altas, como las de todas las personas que llegan lejos”.
Con el apoyo y el cariño de sus seres queridos, a lo que se suma la atención psicológica, Eduardo y sus papás continúan procesando la devastadora pérdida, la cual los ha hecho replantearse el valor de las personas.
“Este dolor tan profundo te hace conocer un gran amor y empatía hacia los demás, saber lo que alguien siente con una tragedia tan grande, esa capacidad de tristeza también la tenemos de amar”, dijo.
Para evitar que más familias pasen por esta situación, ha ofrecido diversas entrevistas en medios de comunicación, espacios académicos, y plataformas digitales como Zoom y Podcast.
Entre sus conferencias tiene programada una en la Universidad Anáhuac Querétaro el 8 de febrero a las 17:00 horas; por otro lado, no descarta la idea de crear una fundación dedicada a la prevención del suicidio y la drogadicción.

Uno de sus grandes logros deportivos fue correr el Maratón de Chicago / Foto: cortesía.
Eduardo y Fernando en un festejo en casa de su papá, en Querétaro / Foto: cortesía.
El abogado tenía una relación de noviazgo con Fernanda Díez Terroba / Foto: cortesía.
Foto: Sergio Olvera
  • La Comisión Nacional contra las Adicciones ofrece a toda la población la Línea de la Vida, 800 911 2000, la cual está disponible las 24 horas de los siete días de la semana, y brinda orientación, tratamiento e, incluso, una guía de sitios para internarse en caso de existir un cuadro de crisis.

En voz de los expertos

Liliana del Olmo

En los últimos meses, los chocohongos se han convertido en la ‘droga de moda’ en México, lo cual ha ocasionado que los consumidores experimenten diversos sucesos de alucinación e, incluso, la muerte.
En relación con este tema, dos profesionales comparten su punto de vista clínico acerca del consumo de drogas y su repercusión, tanto física como mental, en los humanos.

Luis Fernando Díaz López

Médico y psiquiatra por la UNAM, Alta Especialidad en Adicciones por La Salle

¿Qué es un brote psicótico?
Es un trastorno mental en el cual hay una pérdida del juicio y desconexión con la realidad. Su nombre científico es trastorno psicótico breve.

¿Qué lo puede provocar?
Enfermedades médicas como epilepsia, tumores cerebrales, alteraciones metabólicas, o enfermedades mentales como depresión, trastorno bipolar, esquizofrenia o consumo de sustancias.

¿Cuáles son los primeros síntomas?
Se caracteriza por delirios, los cuales son ideas fuera de la realidad, alucinaciones auditivas y visuales, principalmente, y un discurso y comportamiento desorganizado. Los delirios o ideas delirantes más frecuentes son de persecución o paranoia, y sensación de que alguien me quiere hacer daño.

¿Cómo se puede salir de un brote psicótico?
Es una urgencia médica y se da tratamiento específico dependiendo de la causa. En muchas ocasiones se utilizan medicamentos llamados antipsicóticos, pero eso lo debe decidir el especialista. Quienes sufran un episodio psicótico se encuentran en un estado muy vulnerable; en caso de que los delirios y las alucinaciones sean intensos, ocasionan alteraciones importantes del comportamiento, incluyendo intento suicida u otras situaciones que pueden poner en riesgo la vida.

¿Quiénes son propensos a sufrirlo?
Todos aquellos con antecedentes familiares de problemas con esquizofrenia o trastorno bipolar, personas que padecen enfermedades neurológicas como epilepsia, y usuarios de sustancias psicoactivas, sobre todo alucinógenos como LSD, hongos o psilocibina, mezcalina, peyote, ayahuasca, entre otros, así como estimulantes muy potentes como anfetaminas, MDMA, 2CB, metanfetaminas como el cristal. También usuarios de cocaína y mariguana, aunque en menor frecuencia.

Doctor Hugo González Cantú

Psiquiatra y especialista en adicciones en Conadic (Comisión Nacional contra las Adicciones)

¿Qué son los chocohongos?
Nombre coloquial, callejero y popular para un chocolate que contiene una sustancia activa que se llama psilocibina, considerada un alucinógeno al producir alteraciones o distorsión de la realidad.

¿Cuál es el daño directo que genera probarlos?
Muchas veces el mayor problema es que se venden fuera de un contexto terapéutico, sin receta, y que no tienen ninguna indicación médica; son artesanales, se hacen en casa, y con hongos que no tienen tampoco una concentración fija de psilocibina.

¿Cuáles son los efectos inmediatos en el cuerpo?
Si no se conoce la dosis, no se va a conocer la respuesta, y esta puede sobrepasar a lo que estaba esperando, es decir, no solo “pasar un rato agradable”, […] sino llegar a las alucinaciones, ansiedad y agitación por estar en un estado que no se puede quitar tan fácilmente.

¿Cómo se quita su efecto?
Normalmente, las sustancias son desechadas del cuerpo en un periodo de horas, depende muchísimo de cada persona y de su edad. Este proceso puede ser muy difícil para muchos.

¿Son adictivos?
La psilocibina es una sustancia muy peculiar porque produce menos este perfil adictivo como la nicotina o la cocaína. Más bien tiene el problema de que puede producir efectos más allá de los deseados y entonces generar problemas.

Información: Gera Mezher y Liliana del Olmo.