Más de 160 especies de fauna, lagos, arroyos, senderos arbolados para hacer un picnic en familia, pistas de trote, la infraestructura del castillo que tiene más de cien años de historia (actualmente es la Casa de la Cultura de Guadalajara) y el Jardín Japonés, un espacio que celebra la amistad entre las ciudades de Guadalajara y Kyoto, son parte de los pretextos para acudir cuanto antes.