Orgulloso, agradecido y feliz se mostró Marco Tapia al celebrar su cumpleaños 38, pues, en sus palabras, está pasando por una gran etapa en los distintos aspectos de su vida, por lo que estos también fueron el pretexto perfecto para disfrutar al máximo la ocasión.
Fue en la terraza de Campo Marte, donde Marco Tapia se dejó consentir por su familia más cercana, pero también la que está lejos, gracias a que muchos de los invitados viajaron desde distintos puntos de la República con la intención de sorprenderlo en tan especial fecha.
“Hoy es mi cumpleaños, soy Piscis, y qué mejor que pasarla junto a quienes más quiero y estimo; muchos de ellos vinieron desde Guerrero, de donde soy originario, y otras partes del País, y eso me tiene muy contento”, compartió Marco Tapia, empresario experto en temas financieros.
“Ante esta nueva vuelta al sol tengo muchísimos deseos, o mejor dicho, planes: hacer crecer poco a poco el negocio y que vaya bien para todos es uno de los principales; además, tengo varias metas a las que ya estoy llegando, pero les contaré más adelante”, dijo Marco Tapia.
A lo largo del encuentro, la música y baile no pudieron faltar, al igual que comida deliciosa y mensajes de amor para el festejado, ya que hubo un momento en que algunos de los presentes tomaron el micrófono para expresar algunas palabras.
Estoy en una de las mejores etapas de mi vida, porque en el tema laboral me ha ido muy bien y, en el personal, todo marcha perfecto también”.
“Sabes cuánto te aprecio y te quiero, todo lo que representas para mi familia que es la tuya también; decirte que hoy es un día muy importante, porque debes celebrar la vida, principalmente, y que Dios te permite respirar, ver la luz y estar con la gente que te quiere”, dijo Mario Pradetti, amigo de Marco Tapia.
Para acercarse a sus raíces, durante el evento se presentó la danza de “Los Tlacololeros”, una de las más antiguas y populares de la región guerrerense, la cual hizo que todos se pararan para sacar a relucir sus mejores pasos.
+ Sabías que...
La danza de ‘Los Tlacololeros’, de Chilpancingo, representa los esfuerzos de los campesinos por mantener a salvo sus cosechas del tigre que amenaza con comérselas.
