Suman símbolos

La historia de Guadalajara está contenida en el Escudo de Armas de Jalisco. 

El escudo de armas de Guadalajara y su fundación, fueron instaurados como tal oficialmente hasta el 8 de noviembre de 1539, después de varios movimientos de quienes intentaban conquistar ese territorio. 

El historiador de la Universidad de Guadalajara, Juan Real Ledezma, señala que la disputa contra los habitantes originales por el territorio de lo que Nuño Beltrán de Guzmán quería llamar “La Conquista Mayor del Espíritu Santo”, provocó que Guadalajara se fundara cuatro veces en el Valle de Atemajac (1542), estuvo asentada en tres lugares distintos Nochistlán (1532), Tonalá (1533) y Tlacotán (1535). 

El emperador Carlos V de Alemania y primero de España, le otorgó a esta ciudad incipiente y pequeña, la Villa de Guadalajara, el título de ciudad y el escudo de armas. 

En 1823, cuando Jalisco se conformó como un estado libre y soberano adoptó el mismo escudo de armas real que reconocemos hoy.

El escudo

El escudo de armas está conformado por elementos característicos de los escudos de armas españoles de la época: 

  • Dos Leones que simbolizan espíritu guerrero de color dorado o amarillos, rampantes, es decir con las garras abiertas en actitud de ataque. 
  • Un pino de oro realzado de verde en un campo azul. 
  • Siete astas coloradas y el campo de oro.
  • Rematando un yelmo cerrado que usaban los caballeros en la Edad Media, en las Cruzadas para proteger la cara.
  •  En la cúspide hay una bandera roja con una cruz de Jerusalén, en aquella época, durante el renacimiento: una cruz grande y cuatro pequeñas cruces que simbolizan las cuatro llagas de Cristo, porque los Reyes de España, hasta la fecha tienen el título de reyes de Jerusalén y protectores del Santo Sepulcro.  

Para Real Ledezma, el escudo de armas es un recordatorio constante de los orígenes de los jaliscienses, y para el caso de los mexicanos en esa mezcla de la historia del territorio antes y después de los españoles con toda su historia. 

“Entendamos que nosotros somos nosotros, nos guste o no, descendientes de los amerindios y de los eurohispanos, si no asimilamos eso, si no queremos entender eso no vamos a entender nada de la historia y por lo tanto, tampoco del futuro”, dice. 

La historia de una bandera oficial

La bandera de Jalisco conocida y utilizada en la actualidad, tiene una historia joven. 

Es un rectángulo dividido en dos franjas verticales de medidas idénticas con los colores en el siguiente orden a partir del asta: azul y oro y en el centro el escudo de armas oficial con un diámetro de tres cuartas partes de ancho de una franja.

Se usa de manera oficial apenas desde 2008. 

Está basada en un diseño propuesto tras la independencia de México por Prisciliano Sánchez, Gobernador de Jalisco de 1825 a 1826. Esta sería, según su propuesta, una bandera de transición para el Estado, y se asemeja a la que se instauró como oficial ya en tiempos modernos. 

Aquella constaba de tres franjas horizontales, en color azul marino en la superior e inferior y en oro la central con el Escudo de Armas al centro de donde se retoman los colores del  estandarte de armas del Reino de Galicia.

A fin de seleccionar la bandera que sustituiría a la vieja bandera de Priscilano Sánchez, después de la aceptación del diseño actual, el día 22 de febrero de 2008 fue aprobada de manera oficial una bandera de la entidad publicado por la Gaceta Oficial en donde se le da crédito del diseño a Luis Havas, del que casi no hay registro digital, siendo este el primer estado mexicano en tener una bandera oficial con colores distintos a los de la bandera de México.

Aquel documento oficial promulgó también las reglas del uso oficial tanto de la bandera como del escudo de Jalisco y su himno, compuesto por Moisés Guerrero López con los arreglos musicales de Felipe Vázquez Barbosa. 

La ley impone una sanción económica por el mal uso de alguno de estos elementos oficiales de cinco a 200 días de salario mínimo o arresto hasta por 36 horas.

Información: Alejandra Carrillo.
Fotos: Emilio de la Cruz y Jorge Rangel.
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