CENTENARIO OLÍMPICO MEXICANO

El Comité Olímpico Mexicano (COM) celebra este año su centenario en un contexto un tanto adverso para el movimiento olímpico tricolor debido a las diferencias con la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), dirigida casualmente por una medallista olímpica, la ex velocista Ana Guevara.

En estos 100 años de vida del COM mil 990 mexicanos han participado en Juegos Olímpicos de Verano e Invierno con una cosecha de 13 oros, 24 platas y 36 bronces, todos los metales se ganaron en citas veraniegas.

Sin embargo, el COM ha atravesado algunos momentos álgidos, sobre todo en lo que va de este Siglo, desde que se creó, el 23 de abril de 1923, y a continuación se presentan algunos de ellos.

 

EL "BARCELONAZO"

Los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992 marcaron un capítulo importante en la historia del deporte mexicano precisamente por los resultados en esa justa. Se acudía, según se dijo entonces, con la delegación mejor preparada hasta entonces y se aspiraba a varias medallas, y al final solo se consiguió una plata en los 50 kilómetros de caminata, por conducto de Carlos Mercenario.

Esa actuación propició el primer gran conflicto entre el gobierno, a través de la Conade, y el COM con la instalación, por orden presidencial, de una comisión de evaluación de los resultados en los escenarios españoles y la pregunta de qué organismo debía hacerse cargo del deporte de alto rendimiento.

Raúl Gonález, director de Conade, y Mario Vázquez Raña (lentes oscuros), antes de la confrontación por lo resultados en Barcelona 92.

DE PODER A PODER

Con la llegada de Nelson Vargas a la Conade en la administración e Vicente Fox, la primera distinta al PRI, las relaciones con el COM fueron tensas porque el empresario de la natación nunca se llevó bien con el entonces titular del olimpismo tricolor y miembro COI, Mario Vázquez Raña, y el presidente operativo del COM, Felipe Muñoz, a quien ayudó a ganar el oro en los 200 metros pecho de México 68.

Vargas se enfrentó con ellos por tratar de poner orden en federaciones nacionales y el control del Centro Deportivo Olímpico Mexicano al grado de que el Jefe del Ejecutivo tuvo que intervenir, como el mismo Vargas revelaría años después en un libro.

Al final, la Conade creó el Centro Nacional de Desarrollo de Talentos y Alto Rendimiento (CNAR) con el objetivo de llevarse a los deportistas y dejar vacío el complejo administrado por el COM.

Mario Vázquez Raña, miembro COI; Felipe Muñoz y Nelson Vargas, en una de las pocas apariciones públicas juntos.

LA INJERENCIA

La consigna de “meter en orden a las federaciones”, a las que incluso tachó de “autodefensas”, el titular de la Conade, Alfredo Castillo, ex Comisionado para la Paz en Michoacán, se encaró con presidentes de federación y el mismo COM propiciando una advertencia del COI por injerencia gubernamental.


Por su negativa de pagar la multa a la FINA por la cancelación del Mundial de Natación de Guadalajara 2017 y además arremeter contra esta federación internacional, México fue castigado y los exponentes de deportes acuáticos tuvieron que competir a principios de 2016 sin uniformes oficiales ni la bandera del País.

 

Alonso Pérez, presidente de la Federación Mexicana de Beisbol (izq.) y Ricardo Contreras, cabeza del boxeo tricolo (der.)r, eran acérrimos rivales hasta que los ataques de Alfredo Castillo los obligó a hacer un frente común contra él.

EL RESENTIMIENTO

La llegada de la primera mujer a la cabeza de la Conade no supondría mayores conflictos con el COM pues a Ana Guevara se desarrolló como velocista en el Centro Deportivo Olímpico Mexicano (CDOM). Pero nada más alejado de la realidad.
Su revanchismo por no sentirse respaldada por el COM cuando denunció irregularidades en la federación mexicana de atletismo, mantener el recorte de presupuesto al organismo, castigar a deportistas en sus becas y apoyos y más recientemente respaldar a Kiril Todorov como cabeza de los deportes acuáticos en el País pese a estar desconocido por la federación internacional tiene las relaciones entre Conade y el movimiento olímpico tricolor en un “impasse”.