Al férreo defensa de los Pumas le tocó vivir épocas difíciles en el equipo, continuos cambios de entrenador, la huelga de la UNAM que los alejó del Estadio Olímpico Universitario por 11 meses, hasta que en el 2000, sus compañeros le dieron la confianza para portar la cinta de capitán.
Antonio Sancho había salido del equipo, posteriormente Israel López también fue cedido a Chivas, y Beltrán Vargas fue el elegido para ser el representante de los jugadores.
El defensa portó el brazalete por 6 años, y como tal le tocó levantar los dos trofeos más significativos en la era de los torneos cortos: los del bicampeonato del 2004.