Sin tener idea de hacia dónde se dirigían, pero con la certeza de que el destino los sorprendería, miles de invitados se reunieron para asistir a su picnic nocturno favorito, Le Dîner en Blanc México, el cual regresó después de tres años de ausencia.
Me siento muy emocionado, me urgía que llegara este momento que planeamos durante seis meses; nos lo imaginamos como está pasando, así que estamos contentos y satisfechos con todo lo logrado”.
Como en cada edición de Le Dîner en Blanc México, sólo había que cumplir un par de requisitos: vestir un look total white y llevar todo lo necesario para montar su mesa perfecta, desde la decoración hasta los alimentos, con la única intención de compartir y fortalecer lazos entre amigos.
Ésta es nuestra primera vez en este evento y sí debo decir que fue toda una aventura llegar con la canasta, sillas y todo lo demás, pero estamos listos para tener una experiencia inolvidable; vamos a cenar unos quesos y unas carnes frías con vino blanco”.
El spot secreto de este año de Le Dîner en Blanc México fue el Ex Convento del Desierto de los Leones y, aunque muchos ya lo conocían, el misticismo de visitarlo de noche los dejó fascinados, agregando un plus al encuentro que ya de por sí los tenía súper emocionados.
Me encantó la elección del lugar, con un poco de frío, pero pasándola muy bien; he asistido un par de años y todas las locaciones me han fascinado, como aquella vez en Chapultepec, una gran opción para disfrutar dentro de la Ciudad”.
A lo largo de Le Dîner en Blanc México hubo varios instantes especiales, como cuando todos agitaron sus servilletas al aire para iniciar el convivio y luego encendieron luces de bengala creando un claroscuro en el lugar, o un performance de monjes y el show de un quinteto de cuerdas.
Highlights
1. Después de montar sus mesas, los presentes agitaron sus servilletas al aire para iniciar el festejo.
2. El quinteto de cuerdas de la familia Cortés inició su presentación con una versión acústica de ‘Geronimo’, de Sheppard.
3. Uno de los momentos favoritos fue cuando todos encendieron luces de bengala e iluminaron el bosque.
4. Muy ad-hoc con el recinto, un performance de monjes invadió el espacio.
5. La DJ Anna Doll se encargó de prender el ambiente con sus beats.
Al terminar la cena de Le Dîner en Blanc México, nadie se resistió a los beats de la DJ Anna Doll y se pusieron a bailar entre las mesas o el centro del recinto hasta entrada la noche para, más adelante, trasladarse a un rooftop de Santa Fe, donde siguió el after party hasta que el cuerpo aguantara.
Me encanta el ambiente que se genera y que puedas conocer gente nueva, porque nunca sabes quién te va a tocar al lado y eso es divertidísimo; el montaje, la comida, elegir el outfit, todo se disfruta mucho”.
Looks total white
Alan Duarte reencuentra a sus amigos
Después de trabajar varios años en televisión, en el extranjero, Alan Duarte retomó su camino en México para establecerse nuevamente y reunirse con viejos amigos, por lo que no dudó en asistir a Le Dîner en Blanc México, como el pretexto perfecto para socializar y, de paso, disfrutar de una noche llena de magia.
“Me encanta ir descubriendo las personalidades de todos los que se sientan alrededor de la mesa y también darme cuenta que todo mundo pone su mayor esfuerzo para tratar de lucir lo mejor posible y para celebrar con los que más quiere”, comentó el fashion coach, originario de Guadalajara.
Al asistir por primera vez a este encuentro en el País, tuvo la oportunidad de compararlo con sus versiones en otros destinos, ya que, al ser un evento de origen francés, varias naciones han adoptado esta tradición, dándole su propio toque.
En su momento, tuve la oportunidad de ir a esta fiesta en Madrid y en Estados Unidos, pero no aquí y, comparando las distintas locaciones, sí podría decir que ésta es mucho más colaborativa, con mayor calidez entre nosotros; sin conocerte, la gente en automático te acepta o trata de entablar una conversación contigo y eso me pareció muy padre”.
Como experto en la industria fashionista, elegir el outfit adecuado fue todo un reto, pues disfruta mucho la explosión de color; sin embargo, gracias a una de sus firmas de moda favoritas, logró el look ideal, el cual destacó con algunos accesorios.
“Creo que lo que más me costó trabajo fue vestir totalmente de blanco, porque me consi dero una persona muy creativa y suelo usar tonos más llamativos, pero poder romperme la cabeza para conseguir el atuendo fue una
gran experiencia; traté de buscar algo cómodo y que no pasara frío, que llamara la atención en el buen aspecto para que los demás te preguntaran y llegaras a entablar conversación”.