Una década después de haber regresado de Washington, donde se formó y trabajó para el FMI, Peña superó el desafío de mantener en el Gobierno al Partido Colorado, ahogado en disputas internas y acusaciones de corrupción que habían abierto la posibilidad de una alternancia en el poder por primera vez desde 2008.
“Vamos a necesitar de mucha creatividad, imaginación y lucidez para reencontrarnos con nuestro pasado de grandeza y, al mismo tiempo, dar un salto cualitativo hacia el futuro”, dijo Peña en un discurso en el inicio de la jornada electoral.
“No podemos seguir atorados en el pasado. Ese pasado de pobreza y atraso intelectual. El gran reto será insertarnos en el siglo 21”.