Fruto (Antílope, 2023)
“No todas somos madres, pero todas hemos cuidado y hemos sido cuidadas”, señala el texto de presentación de este título en el que Daniela Rea realiza un retrato coral sobre la crianza a partir de 14 voces que transitan generaciones. La propia experiencia de la autora al sentir el agobio por las labores interminables de la maternidad la llevaron a indagar en el tema y buscar resonancia en otras mujeres que maternaban, en esa búsqueda encontró sentido y acompañamiento.
Germinal (Lumen, 2023)
Un trío de ensayos que detona preguntas sobre el embarazo, el parto, la maternidad y la crianza; Tania Tagle comenzó a escribir Germinal estando embarazada y su diario le sirvió para indagar temas como la infantilización de las madres durante el embarazo, la restricción de la experiencia de la maternidad sólo al ámbito emocional y la construcción social alrededor de la crianza. Un libro para quienes son madres, y también para quienes no quieren serlo, pero comparten la responsabilidad de cuidar.
El corazón del daño (Literatura Random House, 2022)
En este híbrido entre narrativa, ensayo y poesía, la escritora argentina María Negroni aborda el vínculo madre-hija desde una relación por momentos asfixiante. “Mi madre: la ocupación más ferviente y más dañina de mi vida. Nunca amaré a nadie como a ella”, escribe. Un libro donde la autora exorcizó también el duelo por la pérdida de su madre y en el que, en paralelo, asoma su biografía literaria.
Los abismos (Alfaguara, 2021)
Galardonada con el Premio Alfaguara de Novela 2021, esta novela de la escritora colombiana Pilar Quintana se adentra en las obsesiones que pueblan el imaginario infantil, como el temor a la orfandad. La historia, ha contado la escritora, surgió pensando en esas generaciones de mujeres que no fueron madres por elección, sino porque la sociedad lo mandataba. “Quería indagar entre la relación de una niña con una mujer que tenía frustraciones en su vida, porque fue una mujer que no tuvo la libertad, como yo sí la tuve, de elegir ser profesional y tener una familia o ser profesional y no tener una familia”.
Cosas que nunca hablé con mi madre (Diana, 2021)
Más de una década tardó Michele Filgate en escribir un ensayo sobre la dolorosa relación con su madre, ese fue el detonante para convocar a otras 16 voces que comparten cómo este vínculo determina, para bien o para mal, a todo ser humano. Las madres, dice Filgate, “están idealizadas como protectoras: personas que cuidan y dan; que edifican a un individuo en lugar de derribarlo. Pero muy pocos de nosotros podemos decir que nuestras madres cumplen con todos estos requisitos. En muchos sentidos, una madre está configurada para fallar”.
La hija única (Anagrama, 2020)
Una novela donde Guadalupe Nettel profundiza en la maternidad, en las dudas y sentimientos de culpa que la rodean a través de la historia de Alina, quien tiene ocho meses de embarazo, pero su hija no podrá sobrevivir; Laura, su mejor amiga, será testigo de todo lo que implica la renuncia a esa hija, al mismo tiempo que mira la vida de Doris, su vecina, madre soltera de un niño con problemas de conducta. Con La hija única la autora ha sido nominada al Premio Booker Internacional.
Una casa llena de gente (Impedimenta, 2019)
Tras la muerte de Leila, se descubrirán una serie de secretos que dejó escritos en su diario y que Charo buscará comprender al investigar a fondo la vida de su madre. La escritora argentina Mariana Sández explora en esta novela cómo determina el estilo de maternaje la vida de las personas: está el ejemplo de la asfixiante generación de la abuela Granny y el de Leila, a quien le tocó compaginar su profesión con las demandas de su propia madre y de su hija.