MADRES QUE DIRIGEN UN PAÍS

En 2018, la entonces Primera Ministra de Nueva Zelanda Jacinda Ardern hizo historia al llevar a su bebé recién nacida a la Asamblea General de Naciones Unidas.

Entonces, tuvo que “tramitar” una certificación de su hija para poder amamantarla mientras estaba en las reuniones. La política declaró después que esperaba que la decisión de llevar a su bebé de tres meses a la Asamblea General de la ONU “abra un camino para otras mujeres”.

“No soy la primera mujer con múltiples tareas, no soy la primera mujer que trabaja y tendrá un bebé, sé que estas son circunstancias especiales, pero hay muchas mujeres que lo hicieron bien antes que yo”.
Jacinda Ardern
Ex Primera Ministra de Nueva Zelanda

Ardern, de 37 años, se convirtió en la Premier más joven de su país cuando asumió el cargo a través de un acuerdo de coalición un año antes, después de unas elecciones no concluyentes.

Tras ser una de las pocas líderes electas que estaba embarazada en el ejercicio de sus funciones, se convirtió después en la primera mujer en la historia de la nación en dar a luz mientras dirigía a la nación, y ejerció su derecho a tomar seis semanas de licencia por maternidad.

La Primera Ministra, que dejó el cargo este año, dijo que requirió del trabajo conjunto con su pareja, Clarke Gayford, quien se quedó en casa como el principal cuidador de la bebé para que ella pudiera concentrarse en dirigir al país, un privilegio, reconoció Ardern, que muchas mujeres no tienen.

También dijo que la naturaleza progresista del público neozelandés fue un gran apoyo desde que anunció su embarazo.

Antes que ella, la fallecida Primera Ministra pakistaní Benazir Bhutto hizo historia al convertirse en la primera lideresa electa en el mundo en dar a luz.

MADRES QUE CORREN MARATONES

La imagen de la ultramaratonista británica Sophie Power amamantando a su bebé de tres meses en el Ultra-Trail du Mont-Blanc (UTMB) de 171 kilómetros en Suiza se volvió viral en 2018, convirtiéndose en inspiración para millones de mujeres decididas a perseguir sus sueños.

No sólo completó una de las carreras de resistencia más duras del mundo -el ultramaratón de montaña de Los Alpes suizos- tres meses después de dar a luz, sino que logró alimentar a su bebé cada tres horas como lo requería.

Con un tiempo total de 43 horas y 33 minutos, Sophie llegó a la meta 20 horas después de la ganadora de la prueba, pero el tiempo fue lo de menos porque para la ultramaratonista lo importante era demostrar que la maternidad no frena otras partes de la vida personal, y con ello, exigir cambios en las reglas de este tipo de carreras.

Con miles de personas que quieren participar en el UTMB,  considerada la carrera a pie de trail running más prestigiosa del mundo, quedar seleccionada es un volado que se resuelve por sorteo. Power quedó seleccionada en 2014 pero estaba embarazada y no le permitieron posponer su lugar al siguiente año. Aplicó los años siguientes, y solo en 2017 salió ganadora para participar en el de 2018, por lo que no dudó en tomar la oportunidad solo tres meses después de dar a luz.

“Ellos permiten posponer la participación a los que se lesionan, pero no si te quedas embarazada pues dicen que es ‘por propia elección’. Estoy segura de que si cambiaran el reglamento en este sentido nadie se quejaría”, lamentó.

Tras finalizar la carrera de resitencia, Power explicó que no hubiera sido posible sin hacer equipo con su marido y sin el apoyo de su hijo mayor, quienes la esperaban en los puestos de descanso para extraer la leche para alimentar al bebé.

“Rápidamente me di cuenta de que esta no es una historia de ultramaratones, no es una historia de carreras, se trata de lo que las mujeres pueden hacer después del parto y que, con el apoyo adecuado, aún podemos lograr nuestros objetivos”.
Sophie Power
Designer

MADRES QUE HACEN PASARELAS

La modelo estadounidense Mara Martin se volvió viral en 2018, mientras caminaba en una pasarela de la revista Sport Illustrated Swim Search, en Miami, amamantando a su hija Aria, de entonces cinco meses. 

Martin explicó después que no se trató de un acto planeado, pues, dijo, la bebé comenzaba a tener hambre porque era su hora de comida y el desfile se había retrasado. “Francamente no me lo pensé dos veces”, explicó a NBC News, luego de que sus imágenes se difundieran por todas las redes sociales.

La editora de la revista explicó también que no tenía planeado que la modelo saliera con su hija en brazos, pero cuando la vio durmiendo tranquilamente y tomando el pecho, la alentó a salir con la bebé si quería.

En ese momento, Martin declaró después que estaba “orgullosa” de representar a las madres trabajadoras y de hacer algo por normalizar la lactancia materna desde una profesión especialmente enfocada en la imagen.

"No puedo creer que esté saliendo en los titulares con mi hija por algo que hago todos los días. Resulta como mínimo irreal. Estoy muy agradecida de poder compartir este mensaje y, con un poco de suerte, de normalizar la lactancia materna y de mostrar a las mujeres que se puede hacer TODO".
Mara Martin
En su cuenta de Instagram

Otras modelos han seguido su ejemplo, como la también estadounidense Maggie Maurer, de quien su imagen amamantando a su bebé en el descanso de una pasarela de la semana de la Alta Costura de París se hizo viral a inicios de este año.

Meses atrás, la neoyorkina ya había intentado mostrar que se puede compaginar su carrera con su deseo de ser madre, como cuando desfiló embarazada de seis meses con un vestido transparente de Nensi Dojaka.

MADRES QUE LA ROMPEN EN EL ESCENARIO

Ser madre no está peleado con ser una de las cantantes de pop más escuchadas en el mundo. Ese fue uno de los mensajes que transmitió Rihanna cuando sorprendió al mundo al anunciar y lucir su segundo embarazo durante el medio tiempo del Super Bowl de este año.

Desde las alturas, vestida con un mono rojo y rodeada de enérgicos bailarines vestidos de blanco, la imponente cantante conquistó al público con las primeras estrofas de sus éxitos, mientras se volvía tendencia en redes sociales su pancita. 

Después de seis años, su regreso a los escenarios fue todo un éxito: con una audiencia de 121 millones, el show de Rihanna fue el más visto de toda la historia del torneo.

La cantante incluso tuvo tiempo para promocionar su marca de cosméticos, arreglándose el maquillaje a mitad del espectáculo.

Mientras algunos comentarios se debatían entre el pop y el futbol americano, su marca de ropa Savage X Fenty fabricó camisetas con el lema: “Concierto de Rihanna interrumpido por un partido de fútbol. Raro pero da igual”.

Desde su primer embarazo, la cantante ya era conocida por defender el positivismo corporal, luciendo atuendos donde visibilizaba su pancita y los cambios en su cuerpo mientras avanzaba su gestación.

Ha asegurado que el cambio más importante que ha vivido en los últimos años ha sido la maternidad, que la ha vuelto más selectiva con sus proyectos, de ahí la importancia de participar en el Súper Bowl, donde pudo “representar a los inmigrantes, a su país, Barbados, y a las mujeres negras de todas partes”.

"El balance es casi imposible porque sin importar cómo lo mires, trabajar siempre va a ser algo que te va a robar tiempo de estar con tu hijo. Cuando tomas decisiones sobre a lo que le vas a decir sí, tiene que valer la pena (...) Y es importante para mí hacer esto, este año. Es importante para la representación, es importante que mi hijo vea esto”.
Rihanna
Antes del espectáculo