Una embarcación sumergible que transportaba a cinco personas en la zona del naufragio del Titanic, en el Atlántico Norte, está desaparecida desde el domingo, lo que ha desencadenado una operación de búsqueda y rescate por parte de la Guardia Costera de Estados Unidos.
La embarcación fue reportada como “demorada” el domingo por la noche a unos 700 kilómetros al sur de St. John’s, Newfoundland, según el Centro Conjunto de Coordinación de Rescate de Canadá en Halifax, Nueva Escocia.
La tripulación
Una de las personas a bordo es el piloto del sumergible. Las otras cuatro son lo que la compañía llama “especialistas en misiones”.
Hamish Harding, presidente de la compañía de aviación Action Aviation, se encuentra entre los que están a bordo del sumergible desaparecido, según Mark Butler, director gerente de la compañía.Harding escribió el sábado en su página de Facebook que se había planeado una inmersión para el domingo.
“Se ha abierto una ventana meteorológica”, escribió.
La operación de rescate
La Guardia Costera confirmó el lunes que estaba buscando la embarcación después de que el barco de investigación canadiense MV Polar Prince perdió contacto con un sumergible durante una inmersión.
“Es una zona remota y representa un desafío llevar a cabo una búsqueda en esa área remota, pero estamos desplegando todos los recursos disponibles para asegurarnos de poder localizar la embarcación y rescatar a las personas a bordo”, dijo el contraalmirante John Mauger, de la Guardia Costera de Estados Unidos.
El sumergible desapareció en una parte del océano con una profundidad de aproximadamente 3 mil novecientos metros.
Aviones de Estados Unidos y Canadá estaban buscando el sumergible, y boyas sonar habían sido desplegadas para ayudar en la búsqueda bajo la superficie. La Guardia Costera también estaba coordinando con embarcaciones comerciales en la zona para ayudar en la operación de búsqueda.
El teniente comandante, Len Hickey, dijo que un buque de la Guardia Costera canadiense y aviones militares estaban ayudando en el esfuerzo de búsqueda, que estaba siendo liderado por la Guardia Costera de Estados Unidos, en Boston.
El instituto francés de investigación marina Ifremer desvió su buque Atalante, equipado con un robot submarino de gran profundidad, hacia el lugar del Atlántico Norte donde desapareció el sumergible.
El buque Atalante, que se encontraba en misión, tiene previsto llegar a la zona hacia las 22:00 horas del miércoles.
Contrarreloj
Los equipos de rescate multiplicaron este martes sus esfuerzos para encontrar el sumergible, en una búsqueda desesperada cuando le quedan “unas 40 horas” de oxígeno a la nave.
El capitán del servicio de Guardacostas estadounidense, Jamie Frederick, dijo en una conferencia de prensa que el rastreo de unos 13 mil km2 no ha dado “ningún resultado” hasta ahora.
La búsqueda, inicialmente restringida a la superficie del océano, ahora también se lleva a cabo bajo el agua.
“Estamos explorando y movilizando todas las opciones para traer a los tripulantes de vuelta sanos y salvos. Toda nuestra atención se centra en los tripulantes del sumergible y sus familias”, declaró OceanGate en un comunicado.
Mike Reiss, guionista de televisión estadounidense que visitó los vestigios del “Titanic” en el mismo sumergible el año pasado, declaró a la BBC que la experiencia fue desorientadora. La presión a esa profundidad es 400 veces mayor que en la superficie.
“La brújula dejó de funcionar inmediatamente y empezó a dar vueltas, así que tuvimos que dar vueltas a ciegas en el fondo del océano, sabiendo que el Titanic estaba en algún lugar”, dijo Reiss.
“Pero está tan oscuro que lo más grande bajo el océano estaba a sólo 500 metros y pasamos 90 minutos buscándolo”, explicó.
Todo el mundo era consciente del peligro de la expedición, dijo a la BBC. “Firmas un documento antes de subir y en la primera página se menciona la muerte tres veces”.
Posibles escenarios
En el mejor de los casos, según el experto de la universidad de Sidney, Titan perdió la capacidad de comunicar o se quedó sin energía.
Si eso es así, su sistema de emergencia lo lanza automáticamente hacia la superficie, lo que permite la localización de la nave.
El segundo escenario es que el sumergible se hundió hasta el fondo del mar, intacto.
Hallar y rescatar al Titan en ese caso sería extremadamente complicado.
Según este experto, hay vehículos de rescate que son capaces de bajar hasta 6 mil metros de profundidad, pero se necesita tiempo para trasladar ese equipo al lugar del drama, y luego al fondo del mar.
El peor escenario es un incendio o algun tipo de percance que afectó a la presión interna de la nave. Eso representa “un fallo catastrófico a ese nivel de profundidad”, indicó.
El sumergible
De acuerdo con el sitio web de OceanGate, el sumergible usado en la expedición se llama Titán, y es un vehículo marino tripulado diseñado para llevar a cinco personas a profundidades de 4 mil metros para realizar estudios e inspecciones del sitio, investigaciones y recopilación de datos, producción de películas y medios de comunicación, y pruebas en aguas profundas de hardware y software.
El sumergible destaca por el uso innovador de materiales en su construcción, lo que lo vuelven más ligero y eficiente. Además, cuenta con un sistema de Monitoreo en Tiempo Real de la Salud del Casco, lo que proporciona mayor seguridad.
Titán es una especie de submarino, pero de movilidad más reducida y con una capacidad limitada para permanecer bajo el agua.
Esas naves cuentan con una tripulación muy reducida, o son dirigidos a distancia.
En el caso del sumergible Titan que desapareció en el Atlántico, operado por OceanGate Expeditions, es utilizado para llevar a turistas hasta el sitio del naufragio del Titanic.
El Titán tiene la forma de un tubo estrecho, con una escotilla de entrada en la parte frontal. Mide 6.7 metros de longitud y 2.8 metros de ancho. Su velocidad máxima es de tres nudos, es decir 5.5 km por hora.
Los turistas que quieren ver el Titanic deben pagar 250 mil dólares por el viaje.
Stefan Williams, un experto en robótica submarina de la universidad de Sidney, explicó a AFP que la presión a esas profundidades es “implacable”.
“Por cada 10 metros que bajas en el mar incrementas la presión en una atmósfera”, explicó.
Eso significa que a la profundidad del Titanic la presión es 380 veces superior a la de la superficie de la Tierra.
La empresa detrás
El sumergible es operado por OceanGate Expeditions, una empresa que ofrece tours de naufragios y cañones submarinos. En su sitio web, afirmó que una expedición estaba “en curso”.
El CEO de OceanGate, fundada en 2009, ha comparado su proyecto con la floreciente industria del turismo espacial. Sus clientes pagan 250 mil dólares para viajar al naufragio en el lecho marino, a más de 3 kilómetros de profundidad bajo la superficie del océano.
OceanGate fletó un sumergible, el MV Polar Prince, para servir como barco en la superficie cerca del lugar de la inmersión. El sitio web de la compañía describe un itinerario de ocho días
Las expediciones de OceanGate al sitio del naufragio del Titanic incluyen arqueólogos y biólogos marinos. La compañía también lleva a personas que pagan por acompañar, conocidas como “especialistas en misiones”. Se turnan para operar equipos de sonar y realizar otras tareas en el sumergible de cinco personas.