DEBUT DIABÉTICO...
Los alimentos típicos de la época navideña suelen tener mayores niveles de grasa, azúcar y sodio.
Consumidos de forma equilibrada, no representan un problema, pero cuando se llega al exceso y es continuo, comienza a haber cambios en el organismo como elevación de presión arterial, glucosa y colesterol, que a su vez, desencadenarían enfermedades.
“Tengo pacientes que debutaron siendo diabéticos o hipertensos en la época decembrina”, apunta el médico internista De León.
“Una dieta hipercalórica, con abundantes carbohidratos, despierta a veces la diabetes”.
Quienes ya viven con alguna enfermedad están en mayor riesgo de empeorar su situación de salud, coinciden los especialistas, y aquellos que ya tienen factores de riesgo asociados con algún padecimiento, son más susceptibles a desarrollarlos.
Pero también pueden verse afectados quienes no tenían ninguna problemática.
“Una persona sana”, ejemplifica la nutrióloga Fraga, “por el consumo excesivo de azúcares puede empezar a desarrollar picos de glucosa muy altos, o problemas con la producción o resistencia a la insulina”.
Los excesos de la temporada casi siempre van acompañadas de otras conductas como disminución en el consumo de agua, sedentarismo y falta de sueño, que en combinación pueden incrementar los riesgos.
Además, suele haber un alza en la ingesta de bebidas alcohólicas, algo que podría repercutir en el hígado.
Y aunque no es tan frecuente, el páncreas también puede resentir los consumos de grasa, ocasionando la inflamación conocida como pancreatitis.
BUSCAR EL BALANCE
No se trata de alarmarse ni restringirse en las fiestas decembrinas. Se puede disfrutar, pero de manera balanceada.
“Así como una ensalada no te traerá todos los beneficios, una rebanada de pastel tampoco te va a provocar diabetes”, aclara la nutrióloga Fraga.
Una de las claves principales es cuidar la cantidad, así como la frecuencia de los alimentos que se ingieren.
Entre las recomendaciones a poner en práctica para prevenir afectaciones, es aprender a escuchar las señales de saciedad. También recordar que no porque se acostumbre comer en exceso, es obligatorio hacerlo.
“Que sepas cuando ya fue suficiente, que no necesitas servirte tres veces, no necesitas tomarte una botella de vino tú solo”, indica Fraga.
“Puedes disfrutar, a veces es muchísimo más placentero cuando no acabas hasta el tope”.
Y en el caso de haberse excedido en alguna comida o festejo, apuntan los expertos, buscar el equilibrio con las siguientes oportunidades, sin caer en restricciones.
Se recomienda incluir todo tipo de alimentos, destaca Fraga, y evitar consumir grandes cantidades de uno sólo, sobre todo si es ultraprocesado.
También se sugiere regular el consumo del alcohol, dormir suficiente, realizar actividades física y no olvidar beber agua.
“La falta de la ingesta de agua a veces nos hace comer más”, dice la nutrióloga, “pero es realmente porque nuestro cuerpo necesita líquido”.
Y en caso de presentar cualquier síntoma, acudir con un especialista lo más antes posible.
MANTENTE SALUDABLE
RECOMENDACIONES PARA MANTENER BUENA SALUD DURANTE LA ÉPOCA FESTIVA:
– Tomar suficiente agua
– Buscar mantener horarios de comida
– No saltar comidas
– En caso de excesos, buscar comer balanceado en la siguiente comida
– No dejar fuera los vegetales
– Comer despacio, masticar lo suficiente
– Mantenerse activo
– Dormir entre 7 y 8 horas por noche