¡A CUIDAR EL CORAZÓN!
La salud cardíaca empieza a temprana edad
¿POR QUÉ ES IMPORTANTE?
Aunque se da por sentado que el corazón de la mayoría de las personas jóvenes es saludable, especialistas en salud de adolescentes señalan que son muchas las cosas que deben saber para cuidar del corazón.
- El corazón es un órgano vital, el epicentro del sistema circulatorio que suministra sangre oxigenada al cuerpo para que todo funcione como debe.
1. DIETA Y ACTIVIDAD FÍSICA
Aunque en la adolescencia se suele ser reticente con los estilos de vida saludables, es importante establecer lo más temprano posible hábitos como mantenernos físicamente activos y llevar una dieta saludable, esto puede encaminar a una persona hacia una buena salud cardiovascular en la vida adulta, señala la cardióloga pediatra Teresa Lee.
- Por el contrario, señala Judith Simms-Cendan, directora del Departamento de Ginecología Pediátrica Adolescente en la Escuela de Medicina Leonard M. Miller de la Universidad de Miami, el rápido aumento de peso en adolescentes debido al exceso de comida chatarra en sus dietas y la falta de actividad física, les expone en gran medida a tener problemas de peso por el resto de sus vidas, lo cual definitivamente les afecta el corazón.
- Para incorporar la actividad física en la vida adolescente, la especialista Judith Simms-Cendan sugiere probar con deportes organizados, por ejemplo grupos de baile, o clases grupales de una actividad que les resulte atractiva.
- “Participar en deportes, ya sea como un atleta competitivo o no, puede prepararnos para un mejor futuro cardíaco”, reafirma la doctora Simms-Cendan.
2. ESCUCHA AL CORAZÓN
En la adolescencia el corazón suele tener buena salud, pero es importante notar signos o síntomas de que algo podría estar mal para buscar atención médica oportuna.
- La cardióloga pediatra Teresa Lee ejemplifica: “si hay algo que antes podías hacer y ahora de repente no puedes hacerlo”, eso podría indicar un problema. “Tú eres el mejor para identificar cuando hay algo que no está bien”.
- Ceirra Zeager, creía que su corazón estaba bien hasta que se desplomó mientras se vestía el día después de su primer baile en la secundaria.
- “A las enfermedades cardíacas no les importa cuántos años tengas”, dice Zeager, quien tenía 14 años cuando sufrió un ataque cardíaco. Ahora tiene 23 años y trabaja como voluntaria en la campaña para la mujer Go Red for Women de la American Heart Association (AHA, por sus siglas en inglés).
Tras su experiencia, la joven sugiere:
- “No dudes en preguntar a los profesionales de la salud sobre el corazón”.
- “Escucha a tu corazón, se pueden oír latidos irregulares, conocidos como arritmias, es posible que no sea nada alarmante, pero se deben examinar”.
- “Adolescentes con quienes convives también pueden ser buenos indicadores de que algo no está bien, si notas que, en comparación con tus compañeros, no puedes hacer las cosas tan bien, especialmente actividades físicas, y si estas empeoran con el tiempo, probablemente es algo que debes comentarles a mamá o papá, o al profesional de la salud”.
3. UN EMBARAZO PUEDE AFECTAR TU CORAZÓN
Las adolescentes embarazadas corren un alto riesgo de preeclampsia, una enfermedad que puede hacer que aumente mucho la presión arterial, explica la cardióloga pediatra Teresa Lee.
- El embarazo puede ser especialmente problemático si una adolescente tiene un defecto congénito del corazón o factores de riesgo cardiovasculares, como presión arterial alta u obesidad, que pueden causar complicaciones en el embarazo.
- “Algunas formas de anticonceptivos son más seguras para jóvenes con enfermedades cardíacas subyacentes”, advierte la especialista en ginecología pediátrica Judith Simms-Cendan. Las opciones anticonceptivas con progestina son más seguras.
Aunque las píldoras anticonceptivas que contienen estrógeno pueden ser más seguras para las jóvenes sanas, aquellas con problemas subyacentes del corazón y factores de riesgo, como presión arterial alta no controlada, deben evitarlas, comenta Simms-Cendan.
4. SALUD MENTAL
Aunque la presencia de latidos acelerados puede ser una señal de problemas del corazón, a veces no lo son, dice Simms-Cendan. Pueden ser una señal de ansiedad, cuya prevalencia entre la población adolescente ha aumentado desde el comienzo de la pandemia de Covid-19 en 2020.
- Sin embargo, se les debe examinar, agrega la ginecóloga pediatra. Y si es ansiedad, deben recibir tratamiento.
Sabías que...
- En México, el Hospital Psiquiátrico Infantil “Juan N. Navarro” recibe mensualmente entre 600 y 700 niñas, niños y adolescentes que acuden a consulta psiquiátrica por primera vez, principalmente por depresión y ansiedad, de acuerdo con un reporte de 2022.
- Los problemas de salud mental pueden afectar a todos los sistemas en el cuerpo, comenta Simms-Cendan. “Afectan el nivel de energía y el deseo de hacer ejercicio. Si estás deprimido, no tienes muchos deseos de moverte. Los adolescentes que están deprimidos también pueden usar el sueño como un escape. Podrían pasar todo el día en la cama”.
5. MAMÁ Y PAPÁ ¡A PREDICAR CON EL EJEMPLO!
Hablar con las y los adolescentes sobre la salud del corazón puede ser difícil para la familia. Pero si quieren que establezcan hábitos saludables, lo primero que deben hacer es dar el ejemplo, coinciden Lee y Simms-Cendan.
- Si te preocupa el peso, la presión arterial o la diabetes de tus hijos, y quieres que sean más sanos, hay que predicar con el ejemplo, insiste la doctora. “La comida que no sea saludable se debe mantener fuera de la casa”.
Tips
Simms-Cendan da algunos consejos para que mamá y papá involucren a sus adolescentes en un estilo de vida saludable:
- Lleva a tus adolescentes a comprar la comida al supermercado para que ellos puedan seleccionar los alimentos saludables que deseen.
- Salgan a caminar juntos o realicen actividad física en familia, es otra manera de modelar comportamientos saludables.
Con información de Laura Williamson / American Heart Association News
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