LORD EN FUGA

Para mí, Pablo Montero tiene el “Síndrome de Elsa y Fred” y por eso se comporta de una forma poco ortodoxa. Seguramente le pareció chistoso ver a la actriz argentina China Zorrilla en esa icónica cinta, huyendo del restaurante junto a su amado sin pagar la cuenta.

¡Claro!, nadie le explicó que en una película es muy simpático ver a una pareja de la tercera edad huyendo del restaurante sin pagar, pero que si lo trasladas a un famoso, con dinero y casi cincuentón, es hasta patético que ese comportamiento sea algo recurrente, porque por lo menos sabemos de dos ocasiones en las que el cantante se ha escapado, aparentemente, sin cubrir sus gastos. 

¿O será que huye porque es alérgico al gluten y le llega el “córrele que te alcanzo”?

Usted, señorita, por si las dudas, no acepte invitaciones del también actor y dígale que mejor se ven en su casa o prepárese para ser la que “pague el pato”, porque quien hace eso dos veces, lo hará por tercera vez.

LADY PAÑALES

Ahora bien, si por el contrario, perteneces al club de las que están dispuestas a todo por conquistar a un jovencito, entonces ponte en contacto con “Lady Pañales”, mejor conocida en el mundo musical como Shakira, porque ella te podría dar unos tips.

Lo que comenzó como una anécdota, ya se está convirtiendo en rumor y después de lo que ha pasado la colombiana con Piqué, puede que piense que un clavo saca otro clavo.

El Daily Mail sostiene que lo del romance entre ella y el actor Lucien Laviscount (Emiliy en París) va en serio, aunque la pintan como una mujer desesperada por encontrar el amor.

Ambos coincidieron en el video de “Puntería” y todo indica que el guapísimo actor salió más efectivo que Robin Hood porque, como dice la canción, “A ti nunca te dirijo, siempre llegas fijo hasta mi punto G”.

¡Santo orgasmo tan buscado!

Esa mujer no deja de sorprenderme: cuando era joven, escribía canciones profundas, de rebeldía y crítica social, y ahora que se acerca a los 50 años nos habla de su sexualidad.

Pues ojalá que por seguir saliendo con hombres más jóvenes que ella, no le cambien el “Punto G” por el “Punto Jejeje” y la hagan sufrir.

Obviamente no tiene nada de malo que una mujer de 47 años salga con un joven de 31, pero las historias al estilo de Merle Oberon y Robert Wolders (ella, 25 años mayor que él) o Emmanuel Macron (46) y su esposa Brigitte (70) no son muy comunes que digamos. Quizás esté hablando por la herida porque yo no agarro ni a uno de 80, pero ese supuesto romance huele a “Pasión de Verano”.

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